El apoyo de organizaciones religiosas y la buena intención de ayudar a personas con tuberculosis, hará posible la construcción de un pabellón especial en el albergue Las Memorias para brindar atención especializada a pacientes con esta enfermedad.
Lo anterior lo compartió Antonio Granillo, director y fundador del organismo civil que por casi dos décadas ha apoyado a los enfermos de VIH/Sida, a quienes ofrece un hogar, alimento, vestimenta, medicamentos y la oportunidad de aprender un oficio que les genere una ganancia económica propia.
El pasado 6 de enero, Las Memorias celebró 19 años de servicio, Granillo expresó que en la Casa, como le llaman al albergue, se han atendido a 3 mil personas y de éstas, 800 lamentablemente perdieron la vida por enfermedades oportunistas que no fueron atendidas a tiempo, una de estas enfermedades es la tuberculosis (TB).
“En los últimos años se han acercado a nosotros personas en situación de calle que tienen tuberculosis, no todos tienen VIH, y a raíz de esto supimos que ellos también ocupaban nuestro apoyo. Por eso buscamos la manera de acondicionar un espacio y conseguir el equipo médico para darles atención”, añadió.
Tijuana continúa ocupando el primer lugar a nivel nacional de esta enfermedad, debido a la alta tasa de casos que registra. Consciente de esto, quienes operan Las Memorias manifestaron su deseo de tener un lugar digno donde se pueda ayudar a los pacientes con esta enfermedad que no cuentan con las condiciones suficientes para salir adelante.
El proyecto visualiza la construcción de un nuevo edificio dentro del predio donde está el albergue principal, en la primera sección de la colonia La Morita, que contará con tres pisos, espacio suficiente para dar atención a 30 personas.
Granillo detalló que actualmente en la Casa albergan a 16 personas con tuberculosis, ocho se encuentran en una fase intensiva del tratamiento, cuatro en la fase que se le denomina de sostén y cuatro más en profilaxis, estos últimos son personas que estuvieron expuestas a la enfermedad y se les da medicamento preventivo para no desarrollarla.
“No solo se les va a ofrecer la parte médica, también ese apoyo integral que les damos a los demás residentes de la Casa. Como son las terapias ocupacionales y la preparación para que desempeñen un oficio y se puedan integrar a la sociedad”, expuso Granillo.
Puntualizó que es importante que los pacientes de estas, y cualquier otra enfermedad, cuenten con un apoyo emocional que les permita salir adelante, dado a que “dependiendo del estado de ánimo, es la condición en la que se encuentran las defensas”, y se elevan o se reducen las probabilidades de que el paciente pueda superar la enfermedad.