Esta tarde en la emblemática tienda de discos La Ciruela Eléctrica, ubicada en la calle Flores Magón (Sexta) en la Zona Centro, de Tijuana, el legendario artesano de música electrónica, Ramón Amezcua, mayormente conocido como Bostich por su trabajo sonoro en el Colectivo Nortec, presentará su más reciente obra discográfica “Aries”, la cual estrena luego de más de 20 años de trayectoria.
“Aries” es un álbum EP de cuatro temas que ofrece el también dentista, quien por vez primera publicó este disco bajo su nombre de pila, del cual se recoge una potente muestra de electrónica, analógica, muy al estilo de una de sus mayores influencias, Kraftwerk, el grupo alemán conformado por Ralf Hütter y Florian Schneider, además de patrones de baile, muy distantes a sus proyectos de Nortec o el dub de Point Loma.
Como un triunfo en familia entre máquinas analógicas, y sintetizadores de los 70’s, el músico tijuanense, Ramón Amezcua dijo a ZETA estar contento de presentar un disco en el que dos de sus canciones fueron producidas por su hijo Eduardo (Grenda), y saldrá a la luz bajo el sello Milovat, de su hija Amor (Mint Field), álbum que hoy será presentado en vivo en punto de las 19:00 horas en las instalaciones de su amigo Sergio Tulum, un legendario curador musical (Ciruela Eléctrica), de quien guarda gratos recuerdos:
“En 1985 conocí a Sergio, dueño de la Ciruela Eléctrica, siempre fuimos melómanos, nos íbamos hasta Los Ángeles a comprar vinilos, intercambiamos discos. Mi conexión con la Ciruela Eléctrica se dio 10 años antes de que abriera la tienda. Él es un gran conocedor de la música, progresivo, experimental, que mejor que con una persona con esa calidad y curador de discos para intervenir su espacio y presentar ‘Aries’”
Siempre sorprendiéndose, Amezcua explicó al semanario el porqué eligió la discoteca en lugar de un bar para presentar su nueva creación: “Quise presentarlo en un lugar que le diera ese honor y respeto a los vinilos, pude presentarlo en algún lugar como un bar donde siempre he tocado, pero mejor elegí La Ciruela donde pondré mis máquinas, tocaré en vivo, voy a poner el vinil en una tienda de viniles. La Ciruela Eléctrica es una discoteca en donde vamos y encontramos discos raros, difíciles de conseguir, creo que antes de ella, era la discoteca nacional, pero este fue el primero donde Sergio presentó esa curaduría de lo que sucedía y pasaba en la música nueva, y contemporánea. Y aún hoy día llega, todo el tiempo tiene novedades, hasta del pasado, como música francesa de los 50’s, realmente nunca terminas de aprender. La Ciruela Eléctrica es un gran referente y un lugar para aprender, escuchar de música nueva”.
Sobre la expectativa de hoy, el músico electrónico dijo que espera que la gente fluya entre los pasillos de la tienda, escuche música y a la vez pueda encontrar algún disco: “La propia tienda en sí es ya un arte instalación, el hecho de estar entre discos vinilos de todas las épocas, ya no nada más nos queda poner los aparatos, cajas de ritmo, un par de bocinas, que la gente entre y escuche. Tocaré en vivo los 4 temas, además dejaré el disco tocándose”, dijo Amezcua, quien el próximo 19 de octubre se presentará en Guadalajara, Jalisco, mientras el 26 en el festival de música electrónica CRSST, en San Diego, California.