Bajo la producción de Celso Duarte, el cuarto álbum de Rosy Arango es un homenaje al país que la vio nacer. Contiene nueve temas y “está inspirado en el corazón apasionado de los mexicanos, en los textiles, sabores y aromas de la riqueza gastronómica”
“Mi Nombre es México” es la cuarta producción discográfica de Rosy Arango, una artista apasionada de sus raíces y el folclor de un país lleno de tradición musical al que le dedica su canto y su talento.
Oriunda de Hermosillo Sonora, Rosy estudió en la Escuela y Casa de la Música Mexicana. En entrevista vía telefónica con ZETA, habló de su nuevo álbum, en el cual manifiesta su arte a través de su voz.
“Estoy muy contenta, es un disco que me llena de fiesta, de energía, que ha sido hecho con mucho trabajo, mucho amor, con una suma de voluntades, porque es un disco que los productores ejecutivos fueron el público que pagó este disco. Es un disco lleno de buenos músicos, de mucho talento que me hicieron favor de sumarse a ese compromiso que tengo de representar y de ser embajadora de la música mexicana, pero ahora, desde mi propuesta sonora, abrazando mis raíces y vistiéndola de un sonido contemporáneo de la música mexicana”, detalló quien ha ganado ser embajadora de la música mexicana por sus producciones llenas de ritmo y folclor, ya que asegura, el compromiso con su propuesta sonora es muy grande.
“El compromiso con las mujeres, por una sociedad que lucha por sus sueños, el compromiso por defender mi cultura y mi tradición, y decirles que si yo pude, tú puedes lograrlo, sea dentro de la música, de la pintura, sea educando y haciendo bien a tus hijos, unos buenos seres humanos que despunten a este país, como ama de casa. Si yo puedo, tú puedes, y decir con orgullo ‘Mi nombre es México’”, expresó la artista.
“Para mí la música, el arte y la cultura es la mejor manera de evolucionar y de revolucionar a la sociedad y a este país, entonces este compromiso es desde el amor profundo, desde el arte, desde la alegría de haber nacido en un país que merece un mejor lugar y creo que es el momento perfecto. Tenemos la mirada del mundo puesta en nuestro país, en nuestras raíces, pero también tenemos la oportunidad de aportar una nueva propuesta contemporánea de música mexicana”, exaltó Arango.
Con veinte años de trayectoria, el recorrido no ha sido fácil para Rosy, sin embargo, esa pasión por la música le da el impulso para seguir abriéndose camino y no claudicar.
“No ha sido sencillo, han sido veinte años de trayectoria, primero haciendo música tradicional, pero obviamente eso me impulsó a llegar con una propuesta, una fusión. No, no ha sido fácil, ha sido un trabajo titánico de ir picando piedra, pero ha valido la pena, porque sabe mejor cuando se llegan a dar pequeños pasos. No ha sido fácil, pero también sé que lo puedo lograr, lejos de llegar a ser famosa, lo que yo deseo ser es perenne en mí cultura, deseo quedarme en el corazón de México”, compartió.
En “Mi Nombre es México” se incluyen instrumentos como cellos, arpa, corno, violín huasteco, requinto jarocho, jarana, guitarra, vihuela, dándole un toque de auténtico folclor.
“Cantamos rancheras pero con una evocación, cada vez son menos los ranchos, cada vez es más la ciudad y a esa mezcla de lo que hubo y de lo que hoy somos, es a lo que yo le canto, abrazando a los jóvenes, a las nuevas generaciones que se atraigan un poco, y este disco trae varias fusiones muy interesantes, letras divertidas, letras sencillas, profundas, que hacen una riqueza y el reflejo de México”.
Nueve temas que abrazan una propuesta sonora contemporánea, sin perder la esencia de la música mexicana: “Tonantzin”, “Mi Nombre es México”, “La Feria de San Marcos”, “Declárate Inocente”, “Las Deudas”, “La Guapachosa”, “Las Margaritas”, “Sones de Ida y Vuelta” (“La Bruja, “María Chuchena”, “Cascabel”), “Viento”.
“Es un disco que te acompaña, de compositores nuevos: Gao de la Cruz, que escribió el tema de ‘Mi Nombre es México’, que da título al disco. Roxana Río, de Veracruz, me dio el tema de ‘La Guapachosa’, que habla de ese sincretismo que hay en nuestra fiesta de Día de Muertos, que es maravilloso y que al son del aire del huapango
hizo una canción juchiteca llamada ‘Viento’; y así también vengo arropada de compositores como el maestro José Alfredo Jiménez , con ‘Declárate Inocente’, una clásica ranchera de José Alfredo, pero la pusimos elegante con un cello y trompetas espectaculares, y esto toma una elegancia diferente, pero no pierde ese sentido de México”, detalló Rosy Arango sobre su cuarto disco, el cual describe como “un viaje por mi República Mexicana en un auto moderno, ya no lo hacemos a caballo, vamos sobre la modernidad, lo contemporáneo, pero bien mexicano”.
Bajo la producción de Celso Duarte y distribuido por Fonarte Latino, SA de CV, “Mi Nombre es México”, es un álbum independiente y hecho con mucha pasión.
“Siempre los artistas independientes la batallamos un poquito más, pero nos sabe mucho más sabroso cuando probamos esa cucharadita de tener listo el disco, es un disco que se cuidó a detalle, el productor musical, que es Celso Duarte, de la mano con nuevos compositores, de grandes músicos, logró esa alquimia perfecta, esa pasión por lo tradicional por esas ganas de refrescar la música mexicana, de darnos la oportunidad de ver un nuevo México a través de esta música. No fue sencillo, pero ha valido la pena. Es un disco muy cuidado, es casi, casi, bordado a mano”, finalizó la intérprete.
“Mi Nombre es México” está disponible en todas las plataformas digitales y, en formato físico, en algunas tiendas de autoservicio.