La noticia de la existencia de dos contenedores frigoríficos con 322 cadáveres de personas sin identificar y 122 más resguardados en el Instituto Forense de Jalisco los animó a acudir a las dos clínicas públicas en Guadalajara y Tlajomulco donde se tomaron las muestras de ADN.
Con dolor y esperanza, cientos de familiares de personas desaparecidas arribaron ayer al Centro de Salud Yugoslavia a dar muestras de ADN. Eran tantos que resultaron insuficientes los turnos entregados. Sólo dieron 100, y se atendieron a 50 más que habían quedado pendientes de la jornada del viernes. Sin importar el tiempo a la intemperie, los familiares resisten para dejar su sangre en unas cuantas gotas que, sin embargo, representan la esperanza de tener una pista de dónde podría estar su ser querido y, quizás, encontrarlo.
Mientras, representantes del Colectivo Por Amor a Ellxs solicitaron a la Comisión de Inhumación que se confronten las carpetas de investigación por desaparición de personas con el ADN de los cuerpos en los tráilers antes de que sean sepultados.
Ciudad de México (SinEmbargo).- Los cadáveres que fueron abandonados en dos tráilers por la Fiscalía de Jalisco comenzaron a ser inhumados ayer en el Panteón de Guadalajara. A la par, cientos de personas se aglutinaron en el segundo día de tomas de pruebas de ADN en busca de sus desaparecidos; tal fue la convocatoria, que muchos se quedaron sin ser atendidos.
El Gobierno de Jalisco informó que ya fueron inhumados 19 cuerpos, de los 322 que se encontraban en los tráilers refrigerados. Los restos humanos fueron depositados en féretros individuales en el panteón de Guadalajara. Además se informó que se gestionó la adquisición de 900 gavetas con los municipios de Guadalajara y El Salto; y que ya se compraron 150 féretros para la inhumación de más cuerpos.
Ayer mismo quedó instalada la Comisión para el Acompañamiento y Observación del Proceso de Identificación que Permita la Inhumación de Personas Fallecidas no Reclamadas, en la que participan la Fiscalía General de Jalisco, la Comisión Estatal de Derechos Humanos, forenses de Jalisco, la Secretaría de Salud de la entidad, la Comisión de Atención a Víctimas de Jalisco y la de nacional; así como los colectivos de búsqueda de desaparecidos Por Amos A Ellxs y Fundej.
Esta comisión se conformó para dar acompañamiento y observación al proceso de identificación que permita la inhumación de los restos humanos. Este proceso también estará acompañado por 16 peritos de la Policía Científica adscritos a la Policía Federal.
Representantes del Colectivo Por Amor a Ellxs dijeron a El Occidental que solicitaron a la Comisión de Inhumación que se confronten las carpetas de investigación por desaparición de personas con el ADN de los cuerpos en los tráilers antes de que sean sepultados.
“No dependen solamente de que los vayan a enterrar al panteón, sino que todas las carpetas de investigación que tiene la Fiscalía (6 mil) se hagan las confrontas con los ADN que tienen esas carpetas para que las personas puedan dar con sus familiares”, dijo Esperanza, representante de ese colectivo.
La noticia de la existencia de dos contenedores frigoríficos con 322 cadáveres de personas sin identificar y 122 más resguardados en el Instituto Forense de Jalisco los animó a acudir a las dos clínicas públicas en Guadalajara y Tlajomulco donde se tomaron las muestras.
CIENTOS BUSCAN A SUS FAMILIARES
La Unidad Científica de la Policía Federal comenzó a recaudar muestras de ADN desde el pasado viernes en Guadalajara y Tlajomulco, un proceso que culmina este domingo y que ha atraído a cientos de personas muchas de las cuales ayer se quedaron sin poder ser atendidas.
Con dolor y esperanza, cientos de familiares de personas desaparecidas arribaron ayer al Centro de Salud Yugoslavia a dar muestras de ADN. Eran tantos que resultaron insuficientes los turnos entregados. Sólo dieron 100, y se atendieron a 50 más que habían quedado pendientes de la jornada del viernes.
Sin importar el tiempo a la intemperie, los familiares resisten para dejar su sangre en unas cuantas gotas que, sin embargo, representan la esperanza de tener una pista de dónde podría estar su ser querido y, quizás, encontrarlo.
Cecilia Muro, quien busca a su hermano y no alcanzó ayer turno para dejar su muestra, narró a el Mural que tendría que volver hoy domingo muy temprano para alcanzar una ficha. “Hay que luchar, así madrugues, lo que queremos es saber algo de él, ya para quitarnos esto”, dijo.
El mismo caso sucedió con un familiar de César Eduardo García, un agente del Ministerio Público desaparecido, quien dijo a el Mural que es muy poco tiempo para tantas personas que buscan a los suyos.
Martha Ibarra, quien busca a su esposo, José de Jesús Casillas, desaparecido en 2015, contó a Efe que durante casi tres años lo han buscado en fiscalías, servicios forenses y en hospitales, pero sin respuesta.
“(Queremos) una pista por lo menos, saber dónde está, que le pasó nada más, una respuesta. Se da uno cuenta de que hay muchísimas personas que ni siquiera sabemos que están y si son parte de nuestra familia”, relató.
Esta es la segunda vez que Sara Ortega y su abuela ofrecen su sangre para que sea analizada y cotejada con el banco genético pues desde hace siete años que no saben del padre de la primera.
Cada vez que descubren una nueva fosa o se sabe del hallazgo de cuerpos si identificar revive en ellas la esperanza de finalmente encontrarlo.
“Más que nada es una esperanza por saber si el llegará a estar en algún lado, darle sepultura. La fiscalía dice que pregunta en diferentes instituciones pero no tienen respuesta. Cuando encontraron los muertos de La Barca (estado de Jalisco) en una fosa acudimos pero no, nada, comentó”.
-Con información de EFE.