Como parte de la ola nacional ocurrida en las pasadas elecciones, Baja California Sur no fue la excepción. El arrastre del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) fue inminente con el apoyo del ahora presidente electo de la República, Andrés Manuel López Obrador. Tan solo el Congreso del Estado quedó representado por 16 diputaciones de la coalición “Juntos Haremos Historia”, conformada por el Partido Morena y el Partido Encuentro Social (PES), y desde luego, el apoyo del Partido del Trabajo en puestos federales.
Héctor Manuel Ortega, Ramiro Ruiz Flores, Esteban Ojeda Ramírez, Milena Quiroga Romero, Perla Flores Leyva, Carlos Van Wormer Ruiz, María Juárez Maceda, Homero González Medrano, María Rodríguez López, Soledad Saldaña Bañales; Humberto Arce Cordero, Sandra Moreno Vázquez, Marcelo Armenta, Rigoberto Murillo Aguilar, Lorena Montaño Ruiz y Daniela Rubio Avilés, son los diputados del cambio.
Una mayoría que prometía ser parte de la cuarta transformación, esa que esperaba ansiosa la ciudadanía; sin embargo, esos principios de “no mentir, no robar y no traicionar”, parece que se les olvidaron a algunos legisladores al momento de tomar su protesta.
Fue el pasado 31 de agosto del presente año que en un acto protocolario, los 21 legisladores de la XV Legislatura del Congreso del Estado, rindieron protesta en representación de cada uno de los sudcalifornianos y fue ahí donde dio inicio la primera escena de traición a la coalición.
De acuerdo a los protocolos de la toma de protesta, los nuevos legisladores tendrían que escoger, quiénes representarían la primera mesa directiva de la XV Legislatura, pero tras dos propuestas, una encabezada por Perla Flores Leyva, diputada del PES, y la otra encabezada por Homero González de Morena, ninguna fue votada con la mayoría de 12 votos, según lo establecen los artículos 161 y 162 de la Ley Reglamentaria, por lo que la elección bajo urna secreta, tuvo que llevarse a cabo en tres ocasiones, lo que puso en evidencia la falta de acuerdos entre los que representan el cambio verdadero, que en este caso se trata de 16 legisladores.
Por lo que, ante la falta de coordinación previa y en presencia del ejecutivo del Estado, Carlos Mendoza Davis, por primera vez se tuvo que solicitar un receso para el diálogo, pues los ciudadanos presentes en el acto, llevaban más de una hora esperando la toma de protesta que no se daría sino hasta elegir la mesa directiva.
Por último, la mesa directiva quedó conformada por el diputado Ramiro Ruiz Flores, como presidente; como vicepresidente, el diputado Homero González Medrano; y como secretaria, Maricela Pineda García; y la diputada Daniela Rubio Avilés como prosecretaria, la cual obtuvo 16 votos a favor, dos abstenciones y tres votos nulos.
Aunque para muchos eso fue muestra de la primera ruptura de la coalición, el ejecutivo del Estado, quien fue testigo de la primera escena, aseguró que eso demostraba un ejercicio democrático.
“No creo que sea una muestra de debilidad, yo creo que fue una muestra de democracia, esos son los tiempos que vive nuestro país y hemos evolucionado, y lo importante no es que haya divisiones, sino que platicando y razonando, los señores diputados saben lograr consensos y ponerse de acuerdo en lo que consideren que es mejor”, aclaró Carlos Mendoza Davis, gobernador del Estado de Baja California Sur.
La segunda escena, se dio el pasado martes 4 de septiembre, a tan solo cinco días de haber tomado protesta, cuando los legisladores en su sesión pública ordinaria tendrían que integrar y constituir las fracciones parlamentarias de la XV Legislatura.
De acuerdo a los convenios establecidos por la coalición “Juntos Haremos Historia”, durante el proceso electoral, las diputaciones se dividieron “un distrito para Morena, un distrito para el PES”, y aunque así fuese, se montó un teatro de ficción, pues incluso esas diputaciones fueron negociadas, poniendo a candidatos de Morena en distritos del PES y viceversa. Hasta el día de la victoria, eso no representaba ningún problema, pues éste se dio hasta el martes, cuando tenían que decidir a qué “grupito” unirse.
El segundo round de la cuarta transformación se dio minutos antes de integrar las fracciones, en el momento en el que los tres legisladores de “la esperanza de México”, decidieron iniciar la legislatura sin representación partidista.
“Por este conducto, comunico mi decisión de no formar parte de ninguna fracción parlamentaria; lo anterior con fundamento en los artículos 67 y 68 de la Ley Reglamentaria del Poder Legislativo de Baja California Sur”, refirió Sandra Moreno Vázquez, Ramiro Ruiz Flores y Homero González.
Esta situación dio una segunda sacudida a legisladores de la XV Legislatura, tras no esperar que diputados decidieran ir sin representación partidista antes que quedarse dentro de la fracción que los llevaría al triunfo.
Según expresó Ramiro Ruiz, presidente de la mesa directiva de la actual legislatura, esta decisión es tomada tras haber quedado registrado como diputado del Partido Encuentro Social, sin pertenecer a él, pues las convicciones de ahora parece que no iban de la mano al momento del registro como candidatos de otro partido con tal de llegar al puesto.
“Es que yo soy Morena, yo fui candidato de Morena, yo fui electo y hay un convenio de coalición entre Morena y Encuentro Social, en el convenio de coalición se establece por formalidad política que un partido va a postular a un candidato en un distrito, y otro partido a otro; a mí me tocó en el convenio de coalición que el Distrito 2 por el cual fui electo, quedó asignado a Encuentro Social, pero yo no puedo salirme de un partido e irme a otro, legalmente no puedo, entonces si yo me salgo de un partido, me puedo quedar independiente, porque mi trabajo político lo voy hacer de Morena”, explicó el diputado Ramiro Ruiz.
Lo que dejó en entendido que antes de unirse a la fracción del PES, preferiría no tener representación partidista, esto sin importar que fuera la representación de ese partido quien lo llevó al triunfo.
