Fue el pasado 17 de julio que reveló la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) a nivel Federal, hizo del conocimiento público, una recomendación realizada al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Baja California Sur.
Esto luego de que una paciente de 33 años, atendida en el Hospital General de la Zona 1 de Medicina Familiar del IMSS, en la ciudad de La Paz, no recibiera la atención integral al padecimiento que presentó de manera urgente y perdiera la vida.
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De acuerdo a la recomendación 22/2018, dirigida a Tuffic Miguel Ortega, director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, el pasado 11 de julio se comentaron los resultados de dicha investigación que la Comisión Nacional de Derechos Humanos tuvo a bien dar seguimiento tras la denuncia de los familiares de quien perdió la vida.
Dicho informe dio a conocer lo siguiente:
“Tras analizar las evidencias del expediente respectivo, esta Comisión Nacional acreditó que servidores públicos del Servicio de Urgencias, Ginecología y de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del citado nosocomio, violentaron los derechos humanos a la protección a la salud y a la vida de la referida paciente, a quien no garantizaron una atención médica oportuna desde su internamiento en el Servicio de Urgencias. Dichas omisiones implicaron que la paciente fuera dada de alta sin haberle atendido la dificultad respiratoria que presentaba y por la cual fue nuevamente internada, sin que se atendiera tal padecimiento, aunado a que fue diagnosticada con diversas enfermedades como acumulación de líquido en el abdomen y fiebre de origen desconocido, cáncer de ovario, tuberculosis, y cuando se le envió a un Hospital de Alta Especialidad en Obregón, Sonora, para su atención, la diagnosticaron con inflamación de vasos sanguíneos”; señala el órgano defensor.
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Sin embargo, según refiere la investigación de la Comisión de Derechos Humanos, el análisis real no tuvo nada que ver con el supuesto diagnóstico en el hospital de la ciudad de La Paz.
En la ciudad de Obregón se le diagnosticó con tuberculosis diseminada, estado vegetativo, traqueotomía funcional y úlceras por decúbito, lo cual evidenció el manejo incorrecto por parte de los médicos citados, quienes al no haber atendido el problema real que presentaba, ocasionaron el deterioro gradual de su salud, que derivó en pérdida de la vida.
Además, la CNDH logró percatarse de algunas notas médicas y de enfermería sin datos, historias clínicas y exploraciones físicas incompletas, al igual que la “carta de consentimiento informado” del ginecólogo, incumpliendo la NOM-004-SSA3-2012 “Del Expediente Clínico”.
Frente a ello, la Comisión Nacional recomendó al director general del IMSS repare el daño causado a los familiares de la víctima, que incluye compensación justa y suficiente, atención psicológica y tanatológica, así como garantizarle a su hija, con carácter vitalicio, la atención médica ante su padecimiento de diabetes mellitus; además de capacitar al personal médico de dicho hospital en materia de derechos humanos y “mala praxis”, así como en el manejo y observancia de las Normas Oficiales Mexicanas.
Al respecto, seis días después de que se hizo llegar la recomendación el Instituto Mexicano del Seguro Social de Baja California Sur, aseguró que atenderá la recomendación de la CNDH por el caso anteriormente mencionado.
Junto a ello que colaborará ampliamente con la CNDH en el seguimiento y cabal cumplimiento a la Recomendación 22/2018. Cabe señalar que al tener conocimiento de lo ocurrido, el IMSS tomó diversas medidas preventivas a fin de evitar hechos similares.
No es la primera denuncia que llega a este Semanario ZETA relacionado a instituciones públicas de salud, hay más en trámite, como el caso de la esposa de Carlos Vega, Policía Municipal de La Paz, quien murió por negligencia en el hospital del ISSSTE, en la capital, y aún no hay respuesta a la afectación.
