El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó este jueves en su cuenta de la red social Twitter que la cumbre con el líder de Corea del Norte, Kim Jung Un, se realizará el próximo 12 de junio en Singapur, y que será la primera reunión entre un mandatario estadounidense en funciones y un líder de Corea del Norte.
“La esperada reunión con Kim Jong-un se llevará a cabo en Singapur el 12 de junio. Ambos intentaremos que sea un momento muy especial para la Paz Mundial!”, tuiteó Trump.
Antes, el magnate republicano aseguró que estaba a favor de la celebración de la reunión en la zona desmilitarizada de la frontera entre ambas Coreas, sin embargo, Singapur fue señalada como la ideal por la mayoría de sus asesores.
Según lo recordó la agencia AP, durante los últimos meses el Secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, viajó a Pyongyang en dos ocasiones para reunirse con el líder norcoreano, como un precursor de la reunión entre ambos mandatarios.
Durante su último viaje, Pompeo regresó la madrugada de este jueves con los tres presos estadounidenses retenidos en Corea del Norte: Kim Dong-chul, un empresario hotelero de 62 años, que llevaba preso desde abril de 2016 acusado de espionaje; además de Kim Hak-song y Kim Sang-duk, que trabajaron en la Universidad de Ciencias y Tecnología de Pyongyang y quienes estaban detenidos desde mayo y abril del 2017, respectivamente.
Trump los recibió en una base militar cerca a Washington, en el estado de Maryland, y elogió al líder norcoreano: “Queremos dar las gracias a Kim Jong-un, quien ha sido de veras excelente con estas tres personas increíbles”, dijo el mandatario estadounidense.
Los tres presos corrieron con un destino diferente que Otto Warmbier, un joven de Ohio que estuvo más de un año preso por descolgar un cartel de propaganda en un hotel y regresó el verano pasado en estado vegetal, y quien falleció días después.
El pasado 27 de abril, los líderes de las dos Coreas, Kim Jong-un (Norte) y Moon Jae-in (Sur), acordaron buscar “la completa desnuclearización” y “una paz permanente” de la península coreana, durante una histórica cumbre celebrada en la frontera entre los dos países asiáticos.
La dos Coreas se comprometieron a abrir conversaciones con Estados Unidos para firmar un tratado de paz definitivo que sustituya al armisticio entre Pyongyang y Seúl.
“El Norte y el Sur cooperarán activamente para establecer un sistema de paz permanente y estable en la península coreana”, señaló la declaración conjunta firmada por el líder norcoreano, Kim Jong-un, y el presidente surcoreano, Moon Jae-in, al término de la histórica cumbre celebrada en la frontera militarizada.
Los dos líderes se abrazaron después de la firma de la declaración, en la cual también se comprometieron a suspender, a partir del 11 de mayo, todas las hostilidades recíprocas que sean una fuente de tensiones militares por tierra, mar y aire.
Ello también incluye las emisiones de propaganda con altavoces instalados en la frontera y la distribución de octavillas en la zona desmilitarizada. “En el futuro, la DMZ se convertirá prácticamente en una zona de paz”, señaló la declaración conjunta.
Ambas naciones se comprometieron a establecer un régimen de paz duradero, un objetivo que los líderes coreanos calificaron como una misión histórica que ya no se puede aplazar. “Declaramos que ya no va a estallar ninguna guerra en la península de Corea”.
Momento Histórico en que Kim Jong-un y Moon Jae-in se estrechan la mano.
Kim Jong-un cruza la frontera para asistir a la histórica cumbre entre las dos Coreas. se discutirá la desnuclearización de la península, un acuerdo de paz y la mejora de las relaciones bilaterales pic.twitter.com/vWT8ZWNd1n— Diego Herrera [DHF] (@Ojos_de_halcon_) 27 de abril de 2018
Las dos partes también acordaron reanudar proyectos humanitarios conjuntos como las reuniones entre familias divididas como consecuencia de la Guerra de Corea (1950-53). Asimismo, el presidente de Corea del Sur anunció que planea visitar en el próximo otoño Pyongyang, la capital de Corea del Norte, para celebrar una segunda cumbre.
“Después de un furioso año de lanzamientos de misiles y pruebas nucleares, una histórica reunión se está llevando a cabo entre Corea del Norte y Corea del Sur”, escribió, por su parte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en su cuenta de Twitter.
“Están pasando cosas buenas, ¡pero solo el tiempo dirá!”, añadió Trump respecto de la cumbre intercoreana. En otro tuit, el mandatario estadounidense expresó su orgullo por la intención de los líderes de las dos Coreas de firmar, a finales de este año, un tratado de paz para finalizar formalmente la Guerra de Corea, 65 años después del cese de las hostilidades.
“¡La Guerra de Corea va a acabar! ¡Estados Unidos y todo su gran pueblo deberían estar muy orgullosos de lo que ahora está sucediendo en Corea!”, expresó Trump en otro tuit.