La mezcla mexicana de petróleo alcanzó los 67.21 dólares por barril, su precio más alto desde noviembre de 2014, situación que empujó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a subir el estímulo fiscal -el mayor en lo que va del año- que aplica al impuesto de los combustibles.
El estímulo fiscal de de 52.5 por ciento a la gasolina Premium y del 70.2 a la gasolina Magna, que el Gobierno Federal otorga al impuesto a los combustibles es el más alto desde que se creó en 2017. Sin embargo, la medida no ha sido suficiente para que los precios de venta al público desciendan o se frene el alza.
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Según lo dicho por la SHCP, para la semana del 19 al 25 de mayo se aumentó a 70.17 por ciento el estímulo fiscal aplicado a la cuota del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de la gasolina Magna, esto es 10 puntos porcentuales mayor al estímulo otorgado para la semana del 5 al 11 de mayo, de 60.11 por ciento.
Para la gasolina Magna, el Gobierno Federal tiene autorizados cobrar 4.59 pesos por litro de IEPS, pero sólo cobrará 1.369 pesos y el resto corresponderá al estímulo fiscal, es decir, 3.221 pesos. Sin embargo, el precio de dicho combustible se incrementó de 16.28 pesos al cierre de 2017, a 17.89 pesos que cuesta en la actualidad, y continúa subiendo.
Según lo recordó el diario El Financiero, en menos de dos semanas, la SHCP subió de 60 a 70 por ciento el estímulo fiscal que aplica a la gasolina Magna, para que el precio por litro no rebase los 19 pesos. No obstante, expertos consideraron que ese nivel de estímulo podría escalar aún más, dado que el precio del petróleo puede continuar aumentando.
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Por otra parte, para la gasolina Premium -cuyo precio se ubica en alrededor de 20 pesos por litro-, para la semana del 19 al 25 de mayo el estímulo fiscal será de 52.50 por ciento, el más alto del año, por lo que el usuario pagará una cuota disminuida de IEPS de 1.843 pesos, mientras que el estímulo será de 2.037 pesos.
-Con información de El Economista y El Financiero.
