La candidata “independiente”, de llegar al poder, se niega a reducir el IVA. Aseguró que las escuelas en el Estado se comparan a las de Holanda y se reconoció como la que más sabe de seguridad pública frente a sus adversarios, “porque acompañé a Felipe como Presidente durante momentos muy difíciles del país”
Con las encuestas en su contra, distanciada de sus anteriores compañeros de partido, hoy adversarios; realizando compromisos de campaña y tomando decenas de selfies para complacer a sus pocos simpatizantes: así se presentó la candidata presidencial independiente, Margarita Zavala, en la ciudad de Tijuana, el pasado 7 de abril.
Zavala es la primera de los suspirantes a Los Pinos que visita Baja California y desde aquí aseguró estar a la altura de las necesidades de un país aturdido por los ecos de una transición política histórica y repleta de incertidumbre.
Luego de su visita por la Universidad de San Diego -en donde presentó su libro “Es la hora de México” y mantuvo los temas de su campaña al margen, debido a la ley electoral-, Margarita regresó a territorio mexicano para manifestar un “mensaje de apoyo y fraternidad” tras las posturas del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Con una imagen suya de perfil, en plena contemplación del muro que divide ambas naciones y citando una legendaria frase de John F. Kennedy, la ex panista dio por concluida su protesta para pasar al siguiente compromiso en la agenda: un foro organizado por Tijuana Innovadora y el Centro de Estudios México-Estadounidenses de la UC de San Diego.
Una vez allí y en pleno cumplimiento de las leyes electorales que obligan a los candidatos a manifestar sus propuestas exclusivamente en los límites de nuestro país, Zavala Gómez del Campo se apresuró y lanzó oleadas de compromisos y posibles beneficios que traerá a la frontera norte en caso de ganar las elecciones.
Convertirá a la frontera una industria del siglo XXI
La candidata aseguró que en caso de convertirse en la primera mujer en liderar al país, su gobierno encabezará la mayor inversión en infraestructura que haya tenido cualquier administración en la historia de la nación. Una inversión aplicada particularmente en la zona norte y -casualmente- en el Estado de Baja California. Del cómo y de dónde, nada.
La ex Primera Dama dijo: “vamos a hablar de un corredor transpeninsular que permita una mayor comunicación de toda la península y hacia todos los sectores y toda la frontera. Yo haré de la frontera, una industria del siglo XXI”, prometió.
Tras asegurar que las fallas de la región se deben a que el actual gobierno tan solo ha invertido el 1% del presupuesto en infraestructura para la zona norte del país, la candidata “ciudadana” dijo que su administración se encargará de generar más cruces fronterizos, agilizar los actuales e inyectarles a todos una dosis elevada de tecnología para conectar de mejor forma a las naciones.
Posteriormente, Margarita volvió a ocupar la fórmula “más y mejor tecnología” para un nuevo compromiso, esta vez en materia de seguridad: “vamos a profesionalizar a la policía. Con controles de confianza, capacitación en valores, derechos humanos, pero también en adiestramiento. Vamos a usar la mejor tecnología, la mejor tecnología para ampliar la capacidad de análisis, de investigación e inteligencia del Estado mexicano”, prometió de nueva cuenta.
Siguiendo con el tema de seguridad, la aspirante quiso distanciarse de sus adversarios, declarando que de entre todos, ella es la que mejor domina el tema debido a su trayectoria profesional. Explicó que en esta materia, ella es la opción por ser abogada, pero también porque en su expediente se encuentra el ser parte de una Comisión de Justicia y Derechos Humanos a nivel local, pero principalmente -remató- “porque acompañé a Felipe como presidente durante momentos muy difíciles del país”.
“En relación con mis adversarios, soy la que más sabe de seguridad”, presumió.
Chiapas como el Congo; BC como Holanda
Sobre temas educativos, Margarita Zavala también fue reveladora, pues aseguró que en caso de llegar a la silla presidencial, tendrá el firme propósito de multiplicar los estímulos en temas de ciencia y cultura, con un 2% del Producto Interno Bruto (PIB) destinado para estos sectores. Porcentaje que, reafirmó, representa más del doble de lo actualmente asignado de acuerdo con sus datos.
La declaración que robó la atención a su público fue la comparación que realizó entre dos sectores geográficamente opuestos del país: “en Baja California, las escuelas públicas son del nivel de Bélgica y Holanda. En Chiapas, las escuelas públicas son del nivel del Congo”, afirmó.
La candidata no quitó el dedo del renglón y expresó que en México necesitamos generar universidades y preparatorias que “sirvan”, ya que a su consideración, no solo basta con que las instituciones brinden educación de calidad, sino que deben fomentar en todo momento el crecimiento económico.
Arrepentida de “Kiko”
En la parte intermedia del foro educativo, la ex panista hizo público su arrepentimiento por apoyar en su momento, la campaña del actual gobernador de Baja California, el panista Francisco Arturo Vega de Lamadrid.
La aspirante presidencial expresó: “he venido muchas veces a Tijuana, muchas. Por muchos temas, pero principalmente en elecciones y de algunos apoyos me arrepiento, de otros no”.
Luego de finalizar sus lista de propuestas -tales como “defender a los mexicanos” de la frontera, desaparecer el ISR para personas que ganen menos de 15 mil pesos al mes e incrementar el salario mínimo nacional-, Zavala atendió a los miembros de la prensa en una pequeña sesión de preguntas y respuestas. Allí, los reporteros reiteraron su inquietud sobre las declaraciones realizadas acerca de sus visitas en periodos de elecciones.
A pregunta explícita sobre cuáles eran los personajes que actualmente le causaban malestar, la candidata contestó: “vine a la campaña del gobernador… y me arrepiento”. De nueva cuenta, ante la falta de claridad en el tema, los miembros de los medios de comunicación preguntaron a la ex Primera Dama si se refería al actual gobernador “Kiko” Vega: “sí, es él”, expresó.
Sin quorum
Tras el evento, el equipo de la candidata ciudadana -la misma que afirma estar haciendo una campaña política “diferente”-, se dieron cita en la glorieta de Cuauhtémoc para realizar un acto de repartición de volantes y pegado de estampillas en los cristales de los autos.
Con pancartas, banderas y un equipo de sonido, bombardeando una poderosa cumbia alusiva a los valores de la aspirante presidencial; el contingente de aproximadamente 20 personas esperó hasta el término del foro, donde la ex Primera Dama se encontraba aún tomándose fotos con los empresarios y amigos que ocuparon las primeras filas del recinto.
Tras la sesión de selfies, Margarita Zavala salió a la calle y esperó el primer semáforo en rojo para acercarse a los automovilistas de la Zona Río de Tijuana. El acto consistió en entregarles información y -con un poco de suerte- convencerlos de pegar una estampilla en el espejo trasero de sus vehículos. Al conseguir pegar la calcomanía -y obtener así la imagen del día- fue misión cumplida para la aspirante más castigada en los índices de popularidad, tanto en redes sociales como al pie de calle.