La niñez es el futuro de la tierra;
niñas y niños sonrientes
con pantalones o vestidos
y las miradas inquietas.
Los valores inculcados
desde el momento de nacer,
van marcando su vida
y dan personalidad a cada uno.
Las niñas y los niños
merecen amor y respeto,
de sus padres y de todos
los que conviven con ellos.
Son bendición en la familia
y esperanza para el alma,
pues los infantes
alegran la vida de sus padres.
Lourdes P. Cabral
San Diego, California. EE.UU.