Alex Mensing, uno de los coordinadores de la asociación Pueblos Sin Fronteras, confirmó que esta noche pasaron ya los primeros ocho migrantes, integrantes de la Caravana Migrante, hacia Estados Unidos para iniciar su proceso de asilo político.
Dijo que se trata de cuatro niños, un joven de 18 años y tres madres de familia.
De acuerdo con la información proporcionada, resaltó que los mayores de edad fueron llevados a centros de detención regular del ICE y los niños a casas hogar, en donde se les determinará su situación luego de que sean entrevistados para exponer los casos por los que están pidiendo el asilo.
Fotos: Manuel Ayala
En una rueda de prensa previa, realizada por la tarde, Mensing había comunicado que hasta el momento ninguna persona de la Caravana Migrante había cruzado la frontera, por lo tanto ninguno de ellos había sido procesado en esta parte de la frontera, tal como lo habían señalado y asegurado autoridades municipales –quienes mencionaron en comunicado que habían pasado 17- y el propio Vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, quien manifestó que los procesos estaban llevándose de forma normal.
Durante la atención a medios, el activista también había resaltado que ninguna persona había podido cruzar debido a que el gobierno estadounidense sigue evitando que puedan entrar a ejercer su derecho a pedir asilo, bajo el pretexto de que no hay capacidad para procesar.
El activista aseguró que en una conversación que sostuvo con un oficial, encargado de las instalaciones de la garita del lado estadounidense, éste le hizo saber que no sabían a qué se debía este retraso, sin embargo admitió que no era normal que pasara tanto tiempo, lo cual le deja en claro que “no es porque no pueden sino porque no quieren recibirlos y procesarlos”.
Durante la atención a medios, se le dio la oportunidad también a algunos de los migrantes para expresar su sentir sobre la situación, además para que compartieran la razón por la cual emprendieron este largo camino, como el caso de Lesly, una mujer hondureña que aprovechó para aclarar que “cada quien tomó solito la decisión de salir de su casa”, dejar sus vidas atrás y poder salir adelante.
Edgar Aguirre, originario de Guatemala, señaló que muchos de ellos están en este camino debido a la violencia que persiste en sus países y en su caso, dijo haber salido por decisión propia y que nadie lo obligó a hacerlo, en referencia a las declaraciones que hiciera el Vicepresidente Pence, al señalar que son víctimas de activistas que se aprovechan de la tragedia de los demás.
Comentarios que también refutó Khenia Elizabeth, originaria de Honduras, quien es madre soltera de tres niños, quien salió desde el 24 de enero de su país debido a la situación política, pidió la visa en Tapachula, Chiapas, pero se la negaron, por eso decidió unirse a la caravana porque no tenía otra opción, debido a que las personas que la venían siguiendo la encontraron en la frontera sur, por eso no puede regresar, porque sabe bien que la pueden matar a ella y a sus hijos.
Por su parte, Alexandra, una chica de la comunidad LGTBI originaria de El Salvador, resaltó que están acá luego de un largo camino y por lo tanto no van a regresar atrás, así venga el frío, viento, lluvia y “ni aunque Donald Trump nos eche militares nos vamos a echar para atrás”, debido a que a sus países no pueden regresar.
Por lo que pidió se les dé una sola oportunidad tanto a madres, niños y personas de la comunidad LGTBI de poder entrar hacia Estados Unidos de forma pacífica y legal para compartir sus casos, para que les brinden el asilo porque no pueden regresar a sus países de donde salieron huyendo debido a todas las problemáticas que tenían.
Luego de la atención a medios, tanto migrantes como activistas lanzaron una serie de proclamas aludiendo a su sentimiento de unión y fortaleza, asegurando que no se moverán de las instalaciones de la garita de El Chaparral hasta que les den una solución y finalmente se unieron en una oración en la que pidieron por el bienestar de todos los migrantes que vienen de Honduras, Guatemala, El Salvador, Costa Rica y Nicaragua.
