En su campaña viajó en un autobús. De Estado a Estado. A Baja California llegó por Mexicali, el viernes 22 de abril de 1988, procedente de Sonora. Era Manuel de Jesús Clouthier del Rincón, el candidato presidencial del PAN, en la elección presidencial de 1988. De hecho, con diferencia de unos días, la gira de Clouthier coincide en tiempo con la que Ricardo Anaya hizo en días pasados, pero con 30 años de distancia.
El Maquío, como se apodaba, era otra cosa. Un candidato de tierra, sin privilegios y sin temor a ser entrevistado. Dedicaba tiempo a lo suyo, sus actos de campañas, en definitiva, no son los de hoy en el partido que ya probó el poder.
Claro que la comparación sale de sobra. Pero Anaya ofreció prácticamente dos horas de exposición pública en su paso por la entidad, en la búsqueda del voto: un evento masivo, atiborrado de acarreados, el martes 17, donde habló 10 minutos, y una conferencia de prensa de media hora al día siguiente. No más.
Volviendo al 88. Manuel Clouthier fue recibido en los límites de Mexicali, el día de su arribo por simpatizantes. Ahí, el primer encuentro. Después ofreció una conferencia de prensa. Luego se reunió dos horas con el Consejo Coordinador Empresarial, comió con amigos y simpatizantes, y organizó una plática con universitarios por la noche.
Muy temprano, de aquel olvidado sábado, Clouthier se reunió con panistas, hizo entrevistas radiofónicas y para televisión que nunca fueron transmitidas. Además, una reunión con mujeres en el casino de Mexicali, otra más con grupos de chicanos y la tarde la dedicó a una marcha que atravesó la ciudad y que concluyó en una especie de fiesta nocturna.
Luego, el finado panista se fue a Tijuana. Abrió su día con otra conferencia de prensa, se confrontó con los medios oficialistas y fue recibido por estudiantes en la Universidad Iberoamericana más tarde. Además, el mitin de rigor.
El domingo llegó a Ensenada, ahí duró dos días e hizo un par de actos masivos. Se entrevistó con empresarios, platicó con un grupo de mujeres, otro de estudiantes, con residentes de colonias populares; fue a misa, se reunió con científicos, con el presidente municipal Ernesto Ruffo; tuvo un encuentro con reporteros, comió con transportistas y agricultores. Marchó por la Avenida Ruiz Cortines, donde llevó un arreglo floral a la memoria de Héctor “El Gato” Félix, fundador de ZETA, asesinado días antes.
De Anaya a Clouthier hay muchísimo más que años de diferencia.