Luca Marafioti, abogado de Tomás Jesús Yarrington Ruvalcaba, aseguró que la audiencia del ex gobernador de Tamaulipas, fue reprogramada para el 26 de febrero, debido a la indisposición del juez del Tribunal Supremo de Italia, que debía determinar si acepta o no el recurso interpuesto contra la decisión del Tribunal de Apelación de Florencia, que el pasado 21 de septiembre falló a favor de su extradición, reclamada por Estados Unidos y México.
Yarrington Ruvalcaba fue gobernador de Tamaulipas por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), entre 1999 a 2004, y está acusado de facilitar a los carteles del Golfo y de los Zetas el transporte de drogas hacia Estados Unidos.
Sobre ex mandatario estatal pesaba una orden de captura de la Corte Federal en Brownsville, Texas, desde 2012, y finalmente fue detenido el pasado 9 de abril en la ciudad italiana de Florencia, con documentación falsa que le identificaba como un empresario mexicano de apellidos Morales Pérez.
El 19 de abril, el Gobierno de México informó que acordó con su homólogo de Estados Unidos que Tomás Yarrington fuera juzgado primero en territorio norteamericano. La Corte de Apelaciones de Florencia aceptó las instancias de extradición a ambas naciones, por lo que la será el propio Ministro de Justicia de Italia quien decidirá hacia cual país será extraditado.
“Estados Unidos y México han acordado que tras la conclusión del juicio contra Yarrington [en EU], y tras una determinación con base en el tratado de extradición entre ambos países, se le entregará temporalmente a México para enfrente ante la justicia los cargos que se le imputan en ese país”, señaló el Gobierno mexicano en ese entonces.
El pasado 18 de julio, Luca Marafioti le dijo a la agencia española EFE, que su cliente sufre “una persecución penal que se vincula fuertemente con motivos electorales y políticos” y que el proceso en su contra no respeta sus derechos, por lo que presentó un recurso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
En aquel entonces, el procurador general de Florencia, Marcello Viola, señaló que ahora la Corte de Apelación de dicha ciudad italiana, encargada del caso, está a la espera de la documentación que deben enviar los países que solicitan la extradición, en este caso México y Estados Unidos.
Marafioti también expresó su temor a que se vulneren los derechos humanos en el caso de Yarrington porque los delitos que se le achacan en Italia no prevén la cadena perpetua. Por ello, el litigante manifestó su temor de que, en el caso de una condena en Estados Unidos, se dé “el riesgo de una pena desproporcionada y la ausencia de cualquier principio educativo” o de reinserción.
Por otro lado, el abogado de Yarrington Ruvalcaba en Italia, subrayó que este mismo riesgo podría darse en el proceso en su contra en México, donde además cuentan con “un sistema carcelario particularmente peligroso”, según le dijo a EFE.
En aquel momento, la defensa del ex gobernador también solicitó a la Corte de Apelaciones de Florencia, permitir a Yarrington el arresto domiciliario, ya que actualmente se encuentra internado en la prisión florentina de Sollicciano.
ATACAN RANCHO DE UN PRESUNTO OPERADOR DE YARRINGTON
Al menos un hombre y 15 caballos pura sangre fueron asesinados ayer lunes por la mañana, luego de un ataque a balazos perpetrado en el rancho “La Providencia”, ubicado en Güemez, Tamaulipas, supuesta propiedad de Eduardo Rodríguez Berlanga, alias “La Conga”, uno de los presuntos prestanombres del ex gobernador Tomás Yarrington Ruvalcaba.
El ataque se registró cerca de las 8:30 de la mañana en el rancho ubicado en el kilómetro 89 de la carretera Zaragoza-Monterrey. Tras recibir el reporte, elementos de la Policía Estatal y Federal arribaron al lugar, don hallaron muerto al caballerango del lugar, quien presentaba varios impactos de arma de fuego en el cuerpo.
“La Conga” era propietario de la constructora Janambres, una de las más beneficiadas con contratos de obra estatal durante el sexenio de Yarrington Ruvalcaba. Además era propietario de más de 2 mil hectáreas en los municipios de Soto la Marina, Victoria, González y Güémez.
