Han pasado más de 130 días desde la última vez que la familia tuvo contacto con el ejidatario, cuya vivienda estaba saqueada al momento de su desaparición. La investigación está en curso y, aunque un hombre fue detenido en posesión del automóvil del desaparecido, un juez permitió que siguiera el proceso en libertad, ya que solo se le imputaron cargos por el uso de vehículo robado
El empresario agrícola Norberto Eaton Aguilar, de 82 años de edad, tiene cuatro meses que desapareció de su domicilio en el poblado de San Carlos, en la delegación de Maneadero, sumándose a la lista de las más de 120 personas en calidad de desaparecidas en Ensenada.
El 2 de octubre de 2017, un hombre fue detenido mientras conducía un automóvil Lincoln 2013 sin placas que fue sustraído de la vivienda del ejidatario el mismo en que desapareció.
Eduardo Torres Negrete, quien conducía el auto, fue puesto a disposición del Ministerio Público y posteriormente el juez lo vinculó a proceso con prisión preventiva, sin embargo, en una segunda audiencia el Ministerio Público no solicitó medidas cautelares, permitiendo que el imputado siguiera el proceso en libertad con la condición de acudir a firmar de manera periódica.
La causa penal es la 00682-2017 por el posible delito de robo de vehículo de motor en la modalidad de uso, hasta el momento la Policía Ministerial no lo ha relacionado con la desaparición de Norberto.
La familia del conocido “Nene” Eaton está resignada y, como otras más en Ensenada, se han convertido en expertas en materia de investigación. Aseguran estar emocionalmente agotados ante los pocos resultados por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
“En el Ministerio Públicos nos dan largas, no trabajan los fines de semana, no hay información porque es día festivo, ¡en fin! Todo lo que tienen de la investigación se los hemos proporcionado nosotros”, refieren los allegados.
En medio de la desesperación, hicieron extensivo un mensaje al gobernador Francisco Vega de Lamadrid para que se involucre en la problemática que enfrentan las víctimas de desaparecidos, desde el trato que reciben del Ministerio Público hasta el derecho que tienen de estar informados.
MUERTES Y LOCALIZACIONES QUEDAN EN INVESTIGACIÓN
La subprocuradora general de Justicia del Estado, Norma Alicia Velásquez Carmona, se abstuvo de hacer declaraciones a la prensa respecto a los avances en las investigaciones de los casos que más preocupan a la sociedad.
“Está en investigación”, respondió una y otra vez, cuestionada sobre las mujeres asesinadas y desaparecidas, así como del caso de Norberto Eaton.
El miércoles 24 de enero, la funcionaria se dirigió a un grupo de empresarios de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), lamentando que los hechos violentos son propiciados por la falta de valores integrales, desorganización familiar, drogadicción, la lucha de los cárteles por las plazas y hasta por las “tienditas”.
Estimó que el 80 por ciento de los asesinatos están relacionados con el crimen organizado y son más difíciles de integrar que los domésticos.
“Sabemos que los domésticos están resueltos, pero los que nos quedan son los relacionados con el narcomenudeo, es alarmante”, mencionó.
En 2016, la fiscalía cerró el año con 76 homicidios en Ensenada; en 2017 se reportaron 192 y, en los primero 25 días de enero, se han cometido 20 asesinatos.
EATON, UN HOMBRE DE TRABAJO QUE NO APARECE
A las once de la mañana del domingo 17 de septiembre de 2017, en su vivienda en el poblado de San Carlos, Norberto Eaton Aguilar hablaba por teléfono con un amigo, a quien le informó que alguien estaba llamando en la puerta; colgó y no se supo más de él.
A un hijo le pareció sospechoso que ese día el padre no se comunicó, y el 18, sus familiares hicieron el reporte. Les pidieron 24 horas de tiempo para salir a buscar, así como descartar que estuviera en algún hospital o casa de amigos. Para el día 19 se apersonaron en la propiedad de la probable víctima para constatar los daños hechos a la vivienda, faltaban pertenencias de valor y una de las puertas estaba violentada; de inmediato presentaron una denuncia en el MP de Maneadero.
Imágenes de las cámaras de videograbación en posesión de la familia y autoridad investigadora, exhiben que el día de la desaparición, alrededor de la 1:24 pm, un pick-up Volkswagen 2017, así como un Lincoln 2013, ambos propiedad de Eaton, salen de la cochera sin rumbo fijo.
Los allegados están en depresión, con problemas de salud y no es como los duelos comunes donde muere una persona en tres días la sepultan e inician los procesos de sanación. “Aquí no se cierra”, aseguran.
“Me cambió mi vida, no tiene otro tema de conversación desde que comienza el día, en la comida, cena. Desde que desapareció no he dormido una noche completa, primero pensando dónde estará tirado, si sigue vivo o no, ahora ya me resigné y lo único que queremos es encontrar sus restos para darle cristiana sepultura”, narró una familiar de “Nene” Eaton.
Como víctimas, han tenido que contratar abogado para que traduzca el lenguaje legal y los oriente, a fin de no ser engañados por las autoridades.
Tristes, los familiares describen a Eaton como un hombre forjado a base de trabajo, esfuerzo, que nada le fue regalado: “Sus manos estaban curtidas por el trabajo, no eran de seda. Estamos en poder de criminales, qué puedes desaparecer personas”.
TAMPOCO APARECE HOTELERO DE VALLE DE LA TRINIDAD
Francisco Javier Martínez, ex delegado del poblado y empresario hotelero, se encontraba en la habitación número 1 en su hotel cuando se escucharon varias detonaciones de arma de fuego, se escondió en el baño, hizo una llamada telefónica a un familiar para informar lo sucedido, posteriormente salió al patio y quien estaba del otro lado de la bocina escuchó un quejido.
Todo quedó registrado en cámaras de video vigilancia, pero nada se sabe de su paradero. La familia de Martínez se ha unido e iniciado operativos incluso en las zonas más peligrosas del municipio para encontrarlo.
ESTADO ES EL RESPONSABLE: COPARMEX
El robo y homicidios son delitos que agobian a la iniciativa privada. El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Ensenada, Jorge Nava, mencionó que el caso particular de Norberto Eaton es alarmante, y hay temor incluso de dar declaraciones al respecto en medios de comunicación.
Indicó que conforme a las recientes estadísticas, en los últimos meses los delitos del fuero común han bajado, existe preocupación porque los asesinatos u homicidios violentos no cesan.
Nava consideró que el combate al crimen organizado en México es nulo, a la par que la prevención al delito parece no existir en los programas de gobierno.
Señaló que el combate al crimen organizado en México es nulo, y que la prevención al delito parece no existir en los programas de gobierno.
Armando León Ptacnik, presidente de la Federación en Baja California de la Coparmex, indicó que lo grave es la combinación de no tener buenos cuerpos policiacos, pero tampoco están coordinados.
Agregó que los resultados ineficientes de los cuerpos policiacos dedicados a la investigación se deben a la corrupción: “La ecuación es muy sencilla, esto no puede ser un pleito entre los cárteles, sino que es la condición que tiene el Estado y esa es la que hay que combatir, porque si está identificado el problema, con mayor razón deberían poder erradicar”.
En su opinión, la autoridad se ha quedado en un punto de tener reuniones de seguridad periódicas, pero una vez fuera todos los mandos, siguen con la rutina diaria.
“Si hacen lo de siempre, los resultados van a ser lo de siempre, deben voltear a ver que están haciendo otras entidades en la materia”, concluyó por su parte Jorge Nava.
La extraña muerte de Karen
“Causa de muerte indeterminada” es lo que se lee en la autopsia del cadáver de la joven Karen Castro, desaparecida a partir de las primeras horas del 7 de diciembre de 2017, cuando salió de su trabajo en un bar y cuyo cadáver se localizó el día 10 del mismo mes, en un rio a más de 150 metros de la vialidad, al costado de un barranco difícil de transitar a oscuras, en el que difícilmente ingresaría por su voluntad.
Ante la ausencia de causa del deceso, la PGJE informó a la familia que lo investigará como homicidios culposo, lo que significa que recibirá menos atención de la que ya tienen los homicidios dolosos. Mientras la familia reclama conocer cómo perdió la vida su hija, y a manos de quién.
Desde el Servicio Médico Forense explicaron que la determinación se debe a que no encontraron elementos en el cuerpo para llegar a una conclusión. Conforme al dictamen técnico determinaron que por el estado de putrefacción llevaba de cinco a siete días muerta, en el cuerpo no presentaba ninguna lesión externa, ni de violación, ni de ataque o defensa.
Debido a la descomposición, fue imposible hacer análisis de sangre.
La zona donde Karen desapareció y el cuerpo fue localizado, solo tiene un acceso vigilado por cámaras del Ayuntamiento y de una empresa, sin embargo, las autoridades han sido incapaces de informar a la familia en qué momento ingresó “por su voluntad” para considerar su muerte como un delito culposo.
En las inmediaciones de la escena del crimen, en el arroyo El Gallo, hay una casa hecha de cartón y una especie de cueva con ropa, basura y más desechos humanos, por un costado, un área usada por hombres que rentan caballos, pero de acuerdo a la PGJE, nadie vio nada.
Ante el desinterés de la fiscalía, como en muchos otros casos, la familia ha realizado pesquisas, y con apoyo ciudadano, lograron imágenes de la noche de la muerte de Karen que muestran que hubo mucha actividad en la zona, lámparas, fogatas; también identificaron parcialmente a los hombres -vagos y viciosos- que estuvieron en el lugar donde fue dejada muerta: Juan Pablo “El Chito”, “Panchito El Mecánico”, José y Alejandro, quienes después de ese día se fueron para las colonias Juárez y Loma Linda, indicaron testigos del lugar de los hechos. Sin embargo, la procuraduría estatal continúa sin avances en el expediente.
Pese a haber enterrado el cuerpo que les entregaron, la familia continúa ante el desconcierto de que su hija medía 1.60 metros, era delgada y de cabello negro, y el cuerpo que resultó positivo en ADN medía de 1.70 a1.73, robusta de y cabello rojo; aseguran que Karen sabía pelear y que se necesitarían dos o tres personas para someterla y llevarla hasta ese barranco donde la encontraron.
La marcha
Karla Cristina, María de Jesús, Rocío Asela, Lesly Mireya, Luz Clara, Josefa, Nayely Viridiana, Viviana Janeth, Sirenia, Rosa, Blanca Marlén, Ana Luisa, Judith, Nataly, Karen, María Guadalupe y Brenda, son los nombres de las mujeres que fueron asesinadas en Ensenada durante 2017 y fueron impresos por una comunidad que salió a marchar el domingo 21 de enero tras la identificación del cuerpo de Karen Castro Jiménez, de 25 años de edad, quien era madre de tres hijos menores de siete años.
Karen desapareció la noche del 7 de diciembre de 2017, y el cuerpo fue encontrado debajo del puente del arroyo El Gallo tres días después; fue hasta el lunes 15 de enero de 2018 cuando se dio a conocer el resultado de las pruebas genéticas.
“Autoridades hagan su chamba”; “No son crímenes pasionales son feminicidios”; “No nos morimos, nos matan”, “Estamos de luto, mañana puedo ser yo, tu hermana, esposa, hija, prima… exigimos respuesta”, fueron algunos de los mensajes que se escribieron en las mantas de manifestación.
El contingente partió del Parque Revolución en Calle Juárez y Moctezuma, hasta la Plaza Cívica, para ofrecer unas palabras de repudio por la situación de violencia en el municipio y, de igual forma, señalaron la indiferencia tanto del presidente municipal Marco Novelo Osuna, como del gobernador de Baja California, Francisco Vega de Lamadrid.