Dos elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México fueron arrestados por la desaparición del estudiante de la Prepa 8 de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Marco Antonio Sánchez Flores, a quien detuvieron en las inmediaciones del metrobús El Rosario, en la delegación Azcapotzalco, el 23 de enero.
El subsecretario de información e inteligencia policial, José Gil García, y el director general de asuntos internos de la policía capitalina, Agustín González Guerrero, informaron que los elementos resguardados quedaron bajo arresto, tras presentarse a declarar en conjunto con otros dos agentes que participaron en la detención, para garantizar el cumplimiento cabal de las investigaciones.
Sobre la desaparición del joven de 17 años, los cuatro oficiales declararon que lo dejaron en libertad a unas cuantas cuadras de donde lo detuvieron; en tanto que la Secretaría de Seguridad Pública de la CDMX está investigando el sistema GPS con que cuentan las patrullas en aras de determinar el trayecto que siguieron los policías una vez asegurado el joven.
A su vez la Procuraduría General de Justicia de la capital del país, dio a conocer que se rastrearía el paradero de Sánchez Flores en hospitales, anfiteatros, reclusorios, procuradurías y fiscalías de todas las entidades de la república; y se analizaría material video-gráfico del C5 y del sistema de transporte Metrobús.
La familia del joven lo reportó como desaparecido luego de la detención de la que fue objeto. “Ante el desconocimiento sobre el paradero del alumno de bachillerato, luego de haber sido detenido” de manera “arbitraria”, la UNAM exigió se proceda a su “presentación pública e inmediata” y se realice “una investigación exhaustiva de los hechos”, para deslindar responsabilidades y castigar “a quien resulte responsable”.