Cientos de personas, distribuidas por el bordo que separa a México de Estados Unidos en el Parque Binacional de Playas de Tijuana, honraron a los migrantes que fallecieron este 2017 en su intento por cruzar esta frontera, gritando “presente” al pase de lista realizado por motivo de la vigésimo cuarta edición de la Posada sin Fronteras.
“Venimos a recordar que al principio de la Biblia, la sagrada familia de María, José y Jesús, tuvo que buscar posada y por fin alguien abrió la puerta… cada año venimos aquí pidiendo posada y ya sabemos que no van a abrir el portón aquí, pero lo que queremos es abrir corazones, pedir posada en el corazón de personas”, declaró el sacerdote Patrick Murphy, director de la Casa del Migrante.
“La plática antimigrante está formando muros en los corazones de mucha gente, queremos rezar para que la gente pueda entender por medio de estos testimonios, cómo está sufriendo la gente y por eso cada año venimos con la esperanza de cambiar corazones de dos o tres personas y es suficiente para nosotros”, añadió.
Con rezos y villancicos, en ambos lados del bordo se reflexionó acerca de las condiciones de Cristo, nacido en situación de migración y pobreza, de piel morena y en Palestina, entonces bajo el yugo del control militar ejercido por el Imperio Romano; a partir de esa imagen, recomendaron, debe verse y valorar a los migrante para poder ofrecerles el trato digno que merecen como tales, tanto por parte de la población como de los gobiernos.
Sobre Trump y sus amenazas contra la población migrante de deportaciones masivas y la construcción de algún muro que impida la entrada irregular a Estados Unidos, Murphy señaló que éste jamás ha sabido lo que es vivir en pobreza y que esto le impide entender el dolor de las familias que están separadas por la frontera; además señaló, a pesar de que hasta el momento estas amenazas no se han concretado, no hay razón para pensar que Trump haya cambiado de parecer.
Los cambios no solo deben darse al interior de Estados Unidos, aclaró el activista, sino también en los países de origen de los migrantes, quienes son desplazados por la violencia y por las pocas oportunidades de mejora en las condiciones económicas de sus familias.
