En materia de política social, la propuesta del Frente Ciudadano por México se redujo a la medida facilona de repartir dinero “a todos los ciudadanos, por el simple hecho de ser mexicanas o mexicanos”. Propuesta que encabeza el dirigente de Acción Nacional, Ricardo Anaya, quien a nombre de la alianza PAN-PRD-MC, afirmó que semejante proyecto no es “irresponsable”. A su modo de ver, el llamado Ingreso Básico Universal constituye “un planteamiento serio”.
En un video difundido vía Facebook, Anaya defiende que la “idea de dar una cantidad de dinero mensual a todos los ciudadanos es y ha sido respaldada por intelectuales mexicanos”, así como por economistas y empresarios de talla mundial. Asegura que la mesada destinada a la población mexicana podría “erradicar por completo la pobreza extrema en nuestro país”.
De acuerdo con el dirigente partidista, este modelo, al ser de carácter universal, eliminaría “por completo el uso político y clientelar de los programas sociales”. De tal manera que desaparecería “ese líder que da los apoyos y amenaza a la gente con quitárselos si no vota por el partido que el líder dice”, agregó el impulsor del Frente Ciudadano por México, alianza que pudiera estar registrándose como coalición electoral a más tardar, el 13 de diciembre, rumbo a los comicios de 2018.
La plataforma registrada por el Frente ante el INE, comprende tres directrices de “combate”, en cuestión de “desigualdad y pobreza”, “corrupción” e “inseguridad”. Por lo que respecta a la primera, el planteamiento se constriñe al Ingreso Básico Universal. En cuanto a generación de empleos, no se vislumbra propuesta exclusiva.
Anaya asegura que la repartición mensual de recursos tiende a que “la gente” gaste más y ello cause “que crezca la economía y se generen más empleos”. Una solución de corte populista, considerando que antepone el bolo o la dádiva a un esquema formal de políticas en materia de productividad; y la cual emana de alguien que ha llegado a decir que el populismo no es opción en el país.