La creación del Reglamento Interno de la Dirección de Bomberos del Municipio de Tijuana, aprobado por el Cabildo de Tijuana, el martes 5 de septiembre, es el primer paso para poner orden y lograr la integración justa en cuanto a derechos y prestaciones del personal operativo tanto de base, como de confianza y voluntario, expuso Carlos Gopar.
El director de Bomberos de Tijuana se mostró satisfecho por la aprobación de la nueva ordenanza municipal, la cual consideró un logro, ya que es la primera con que se cuenta después de 95 años de haberse creado el H. Cuerpo de Bomberos.
“Todo ese tiempo nos regimos por usos y costumbres”, puntualizó, lo cual permite cierto relajamiento en la operación, al grado de caer en omisiones como el no portar el equipo completo y adecuado a la hora de participar en el combate de algún incendio.
Además de establecer derechos y obligaciones al personal, el reglamento obliga a la autoridad municipal a capacitar y dotar de equipo al personal -uniformes y herramientas- cada tres años, así como proveer a la dirección de unidades, maquinaria e infraestructura necesaria para su correcta operación.
“Por primera vez se cuenta con un documento por el cual nos podemos regir y por el cual, al ser un reglamento aprobado por el Cabildo, establece obligaciones a la autoridad municipal”, subrayó Carlos Gopar.
El funcionario consideró que después del reglamento, el paso que sigue es homologar los sueldos y prestaciones de bomberos de base con los de confianza y numerarios: “es abismal la diferencia entre un bombero de base y uno numerario”, señaló al subrayar que esta diferencia se puede abatir en un futuro próximo, “hay temas que son de voluntad, más que de factor económico”, expuso.
Dijo que la proyección para 2018 es la creación de nuevas plazas de bomberos, así como la instalación de la estación número 18 en Valle de Las Palmas.