Por múltiples denuncias ciudadanas, las cuales señalaban presuntos malos manejos en empresas dedicadas al reciclamiento y tratamiento de residuos peligrosos, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente realizó visitas de inspección a 11 empresas en Tijuana, resolviendo con una clausura parcial y temporal de la Lavandería Industrial Maypa.
Arturo Rodríguez Abitia, subprocurador de Inspección Industrial de la dependencia federal, informó a ZETA que si bien se realizan visitas de inspección ordinaria a las 20 empresas registradas en Tijuana, dedicadas a este giro comercial, se inspeccionó de manera extraordinario a 11 de ellas, entre marzo y mayo de 2017, por la queja de exceso de emisiones de contaminantes a la atmosfera.
De la visita de inspección practicada a la empresa Maypa, el 13 de marzo, se detectó cuatro irregularidades en los procesos de la misma, siendo la más grave de ellas el no poder acreditar que se estuviesen respetando los límites máximos permitidos para emisiones de gases contaminantes a la atmosfera, a través de sus incineradores, por lo que este proceso fue clausurado.
El resto de las irregularidades encontradas por Profepa fueron relacionados con los residuos almacenados en la cámara refrigerante, los cuales no contaban con etiquetado que señalara su naturaleza y peso; del mismo modo el no contar con un reporte de descargas anuales y con una cédula de operación anual que los identifique como empresa generadora de residuos peligrosos, habiéndose subsanado hasta el momento, las últimas dos irregularidades.
Una vez que el procedimiento administrativo llegue a su fin, después de que Lavandería Industrial Maypa solvente la totalidad de las irregularidades, se resolverá respecto a la sanción económica que corresponde a la empresa, la que podría alcanzar un máximo de alrededor de 3 millones y medio de pesos, expuso el funcionario.
Al respecto, el Gerente Ambiental de Maypa, José Antonio Cortés Guedea, señaló que, desde el 9 de agosto, acreditaron ante Profepa contar con residuos plenamente identificados en su cámara refrigerante, esto con la evidencia fotográfica correspondiente.
Además, señaló que en próximos días se contará en la empresa con la presencia de inspectores de la dependencia, para que vigilen los peritajes que realice un laboratorio certificado para demostrar que la empresa cumple con las emisiones permitidas por la Norma Oficial Mexicana NOM-098-SEMARNAT-2002, Protección ambiental-, Incineración de residuos.
Afirmó que, de ocho procedimientos autorizados a la empresa, los cuales requieren la revisión de 216 puntos de cumplimiento en total, Profepa solo halló las cuatro irregularidades ya especificadas, por lo que la empresa cuenta con más del 98% de cumplimiento.
Sobre la clausura de su incinerador, Cortés Guedea señaló que esto se debió a un error del operador del mismo, ya que este omitió anotar en la bitácora de operación, el uso de la misma en cierta fecha, siendo que el laboratorio que monitorea a la empresa sí registró la emisión de contaminantes.
Comentó que si bien, intentó explicarse esta situación a los inspectores de la dependencia, estos consideraron que por este error, no existía certeza del cumplimiento en el límite de las emisiones.
Cortés Guedea concluyó señalando que la publicación de un comunicado por parte de Profepa, el cual informaba esta clausura parcial, perjudicó económicamente a la empresa, ya que no solo dejaron de recibir residuos patológicos, sino que clientes cancelaron sus contratos. Señaló que de considerarse excesiva la sanción económica que establezca Profepa, se apelará la misma por la vía judicial correspondiente.