Eres algo tan preciado para mí,
porque tus ojos fijos se iluminan al mirarme.
¿Me quieres?, te he preguntado hasta el fin,
me has contestado que sí, que sí.
Te amo con locura, ya lo sé,
pareces no creer en mi delirio.
Cuántas veces soñando pienso en ti,
recordándote siempre en mi camino.
Eres toda para mí, tu ideal es mi fortuna.
Caminando iré hacia ti, dos almas formarán una.
Las estrellas y los cielos nos miran al pasar,
pero ya no volveremos a mirar hacia atrás.
Porque te quiero, porque me quieres,
por eso nos volveremos a besar.
José miguel Ángel Hernández Villanueva
Tijuana, B. C.