* El domingo 17 de julio de 1781, masacre en Yuma
* Martirizan a cuatro padres franciscanos
* En las misiones de la Purísima Concepción y San Pedro y San Pablo.
Volví atrás y paré en el mismo sitio donde la había probado la primera vez; aquí advertí al anochecer, que las corrientes que por la mañana iban al nordeste giraban ya al sudoeste, y se iba descubriendo ya una isla baja; oyéndose grande murmullo de aguas que corrían, por lo que me pareció que el río Colorado desembocaba en dos brazos poco distantes entre sí; pero al otro día vi que era solo uno. Toda la noche oí el grande ruido de las aguas.
1775. Cuando el río Colorado viene crecido, se extienden estas aguas hasta la Sierra de Santa Bárbara, que es ramo de la Sierra Madre de California, con rumbo al sudeste, rematando en estas playas y quedando libre un gran valle hasta la Sierra de San Jerónimo, que acaba donde hice noche el día 18, de lo que colijo que en tiempo de las crecientes grandes del río, subirá el agua por esta playa entre las sierras de Santa Bárbara y San Jerónimo hasta aquel sitio donde en la primera expedición encontraron aquella grande porción de pescado varado o en seco, de que se hace mención en su Diario.
Detrás de la Sierra de Santa Bárbara vi otra mayor, que empieza en la Sierra Madre de California, y va a rematar en la playa del mar, a la que llamé de la Natividad. Tras de estas dos, hay otra más grande, que saliendo también de la Sierra Madre finaliza en la playa, en cuya punta tiene un puerto o abra por donde me dijeron los indios se comunican las aguas, al que llamé de San Pedro. Mirando al oriente divisé una sierra alta y corta que me pareció ser la Prieta, que como dije el año de 71 cae al poniente de Sonoitac.
Por todo lo dicho me persuado, a que en tiempo que el río Colorado no viene crecido, se ha de poder pasar de aquí a las misiones de California Baja, pues a ese sitio llegaron muchos indios serranos a comer de los frutos de esta tierra, los que me preguntaban si iba a ver a los padres de California Baja, o a los de San Diego. (Fr. Francisco Garcés, Diario de Exploraciones).
1781. El domingo 17 de julio de 1781, se tocó a misa, y no habiendo en el pueblo de La Concepción más soldados que el comandante don Santiago Islas, y el Cabo Baylón, comenzó el padre Garcés la misa, y al pasar el misal para el Evangelio, se oyó el alarido de los indios, que cayeron en grandes escuadras y sitiaron la iglesia y las casas. Suspendida a misa, salió el comandante a tomar las armas, y al salir de su casa, que estaba muy inmediata, le oprimieron los enemigos y prontamente le quitaron la vida a palos. (El Padre Garcés, misionero mártir del Río Colorado, Ing. Oscar Sánchez, p. 154).
1781. (17 de julio) Mucho más ejecutivos fueron los estragos que el mismo día y hora hicieron los rebeldes en el pueblo de San Pedro y San Pablo, donde eran ministros el P. Fr. Juan Días y el P. Fr. Matías Moreno; mataron a los padres y al padre Moreno le cortaron la cabeza con un hacha, no se supo si estando vivo o muerto, y matando a algunos pobladores; a otros los hicieron prisioneros y obligaron a que echaran al río las imágenes y vasos sagrados, robando los ornamentos y cuanto había en el pueblo, pusieron fuego a la iglesia y casas y se llevaron a todas las mujeres cautivas. (El Padre Garcés, misionero Mártir del Río Colorado).
Germán Orozco Mora reside en Mexicali. Correo: saeta87@gmail.com