Más de 250 personas representantes de diversas agrupaciones y provenientes de varios municipios de Baja California, realizaron una protesta a las afueras de la planta cervecera Constellation Brands, y tras algunas horas decidieron desplazar su comitiva hasta donde se encontraba el evento del Presidente Enrique Peña Nieto.
Luego de realizar una caravana que se originó de las inmediaciones del Centro Cívico, el grupo de manifestantes, mayoritariamente de representantes de Mexicali Resiste y agricultores del valle de Mexicali, anunció un nuevo plantón a las afueras de la empresa trasnacional, señalando que impedirían el ingreso de más maquinaria.
Fotos:Eduardo Villa
Durante el mitin, un agente federal se vio involucrado en problemas debido a que decenas de manifestantes lo rodearon e increparon, pues les molestó que estuviera fotografiando a los quejosos.
Por fortuna el hecho no pasó a mayores y permitieron que se retirara del lugar; minutos después fue visto dirigiendo el tránsito en la carretera federal.
Luego de algunos mensajes de repudio hacia el gobernador Francisco Vega de Lamadrid y el presidente Enrique Peña Nieto, el numeroso grupo se desplazó hasta la planta cervecera y realizó un nuevo mitin en la entrada principal, para luego regresar a los plantones cercanos a la carretera.
Ahí se realizó un tercer mitin en el que decidieron dividir el grupo para hacer presencia e incomodar en el evento programado a las 15:00 horas.
Durante la primera parte de la protesta el clima fue benévolo, pero cuando montaron la segunda protesta en el ejido Colima la situación cambió, lo que complicó las intenciones de los manifestantes que aún así lograron permanecer aproximadamente 3 horas con reclamos y consignas frente al muro de vigilancia que realizaron agentes federales con equipo antimotines.
A unos tres kilómetros de donde se instaló la carpa que cubrió a los representantes de los tres niveles de gobierno, para resguardarse del Sol, decenas de manifestantes reclamaban el intento de la empresa trasnacional de apoderarse del agua de Mexicali, lo que sólo fue escuchado por los guardianes federales que se notaban afectados por las altas temperaturas.
Cuando la situación se relajó, manifestantes comenzaron a bailar y cantar, e incluso hubo algunos que ofrecieron agua a los uniformados, pero estos rechazaron la oferta por consigna más que por falta de ganas.
Tras la retirada del Comandante Supremo, los integrantes de Mexicali Resiste tomaron sus vehículos y regresaron al plantón, donde pretenden continuar la resistencia no violenta.
