Para la actriz María Rojo, invitada en turno del programa Crece Leyendo, el hábito de la lectura es comparable en importancia con la higiene bucal, por la presencia que debería tener en nuestra vida diaria y su familiarización desde temprana edad: “Es algo que se debe empezar desde niños casi, casi, como lavarse los dientes tres veces al día. Uno no se debería de ir a dormir sin antes leer, pero no 20 minutos como dicen, yo creo que más. Es muy importante escoger una lectura acorde a la edad y personalidad del niño, porque si empiezan dándole cosas que nos les interesan o que tienen que ver con los superhéroes de las películas norteamericanas, luego no van a querer leer un verdadero libro”, declaró para ZETA.
De visita por Baja California desde el lunes 26 de junio, la actriz llegó hoy a Tijuana para promover la lectura con el cuento de Gabriel García Márquez, “Solo vine a hablar por teléfono”, que en estos momentos lee en la Casa de las Ideas, ubicada en Camino Verde. Mientras que a las 8:00pm, hará lo propio en la Casa de la Cultura Playas de Tijuana, donde también compartirá con el público su experiencia con el texto, al haberlo protagonizado para el cine en la película de Jaime Humberto Hermosillo, “María de mi Corazón” (1979).
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Describiéndose como una lectora por épocas, al saltar de un autor a otro sin seguir un patrón definido, en su paso previo por la región María Rojo también leyó textos de Víctor Hugo Rascón Banda: “Los traje porque fue un amigo muy doloroso que perdí hace diez años, el año que viene. Él significó mucho en mi vida y casi en la vida de todos los actores mexicanos por ser unos los dramaturgos contemporáneos; hizo ‘Armas Blancas’, ‘La Fiera del Ajusco’, ‘Contrabando’. Su drama fue que murió muy joven y tuvo una enfermedad muy larga, murió precisamente unos días antes de mi cumpleaños, el 12 agosto. Fue una gente muy querida para muchos actores que ahora son importantes en México y fue nuestro amigo durante más de 20 años, casi desde que llegó (a la Ciudad de México) de Chihuahua”.
Hacerle un homenaje al escritor que además ejerció como abogado, es uno de los pendientes de la actriz que recién leyó a la ucraniana Irene Némirovsky, Isabel Allende y una publicación sobre Elena Garro: “Nunca tengo un solo libro. Mi mamá era maestra de literatura así que mi familia, bueno, la familia de mi madre, porque mi padre estuvo ausente toda la vida, siempre tuvo mucho interés en la cultura y por leer. Tengo dos hermanas, una trabaja en la sinfónica, la otra es psicóloga y yo fui la rara que decidió ser actriz”, finalizó.
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