De 52 camiones para el servicio de recolección y transferencia de basura rentados desde abril a la empresa Turbofin, 7 fueron entregados al XXII Ayuntamiento de Tijuana, para lo cual este lunes 23 de mayo se realizó un evento para presentar públicamente el incompleto equipo que, a pesar de la emergencia, no se pondrá en operación hasta dentro de una semana.
Cuestionados sobre quién tomó la decisión de adjudicar directamente la renta a Turbofin y los términos del contrato, ni Ricardo Lomelín Clapera, secretario de Desarrollo Urbano y Ecología, ni el tesorero municipal, Ricardo Chavarría, supieron informar al respecto, “fue una decisión colegiada”, aseguró Lomelín, sin dar nombres de quienes participaron en el fallo.
Del equipo mostrado, el titular de la SDUyE informó que se trata de unidades con una capacidad de 8.5 toneladas, con tecnología nueva “y esa es la razón por la que no salen el día de hoy, no se puede, se tiene que capacitar al personal en cuestiones de hidráulica de carga, de uso de los mismos, son camiones de último modelo y se tienen que tener ciertas consideraciones para unidades nuevas”.
El resto de las unidades se espera para la próxima semana
Será hasta dentro de una semana, el lunes 29 de mayo, cuando se realice otro evento en el que el alcalde Juan Manuel Gastélum dé el banderazo para que operen los 7 camiones recolectores, los cuales se sumarán a otro tanto que para entonces la empresa Turbofin compromete entregar.
La totalidad del equipo será recibido hasta agosto de este año porque “no se puede desgraciadamente todo junto por el armado de los mismos, el sistema hidráulico, la caja, el chasis, una serie de requerimientos técnicos que no se tienen en agencia, por llamarlo de alguna manera”, fue la explicación que dio Lomelín para justificar la no entrega total del equipo arrendado desde abril.
Según el contrato de arrendamiento, al cierre de 2016 el gobierno de Juan Manuel Gastélum habrá desembolsado 80 millones de pesos por el arrendamiento de las 40 unidades de recolección de basura y 12 de transferencia, inversión que para el tesorero municipal Ricardo Chavarría, “no es la óptima ni la necesaria”.
De acuerdo al requerimiento, indicó que para el servicio de recolección de basura se ocupan 100, pero el municipio carece de recursos económicos para sufragar ese déficit, “Incluso los 52 camiones se salen de la posibilidad económica del Ayuntamiento, sin embargo, por el estado de emergencia que se detectó en materia de limpia que conlleva una connotación de salud pública, fue necesario y urgente hacerlo –el arrendamiento-“.
El contrato de arrendamiento se signó por lo que resta de 2017 y para el 2018 se podría continuar con este esquema, aunque por una renta menor, ya que al año se estarían pagando 73 millones de pesos, ponderó.
Adelanto la posibilidad de comprar camiones recolectores de basura, esto con fondos federales, proyecto que podría concretarse en 2017.
