Para la ex diputada federal Carmen López Segura, “los tiempos obligan a que la dirigencia estatal del PRI esté en manos de una mujer”, según refirió en entrevista con ZETA.
Ante los pésimos resultados del instituto político en la elección de 2016, y con la permanencia del actual dirigente, Chiris López Alvarado, cuyo relevo se solicitó desde entonces, la priista tijuanense observa que “es necesario darle un giro al partido, otra imagen”.
Es por ello que por parte del Organismo Nacional de Mujeres Priistas (ONMPRI) se hizo un proceso de selección, el sábado 20 de mayo en la ciudad de Tecate, con la finalidad de postular a una militante como aspirante a presidir el Revolucionario Institucional en Baja California. Dirigentes municipales, lideresas de sectores, organizaciones y agrupaciones, determinaron que López Segura, quien encabeza el organismo, era la indicada para pelear por la dirigencia.
En el marco de la votación, en segundo y tercer lugar quedaron las ex regidoras Martha Rubio y Franciscana Krauss, ellas, en todo caso serán las propuestas femeninas para el Comité Estatal.
Carmen López Segura no niega que en caso de contender por la dirigencia, “nos van a poner muchos obstáculos”, toda vez que, según opinó, se tiene la idea de “que (las mujeres) no tenemos la capacidad”. Percepción con la que dice no estar de acuerdo, en función de que a nivel nacional, considera ha habido presidentas partidistas destacables como Beatriz Paredes y María de los Ángeles Moreno. En el plano estatal, igualmente, se refirió al periodo de Nancy Sánchez Arredondo (quien fue reemplazada por Chris López).
Tampoco demeritó el perfil de las figuras masculinas que presuntamente aspiran al mismo cargo, tales como David Ruvalcaba, Jesús García, Lauro Aréstegui o Carlos Murguía. De ellos, dice respetar “su punto de vista y su experiencia”, entre otros aspectos. “Pero las mujeres podemos hacer la diferencia”, insiste.
En específico señaló estar “convencida de que las mujeres podemos hacer una dirigencia más abierta a las bases; no nos prestamos a los malos tratos”, ni a negociaciones de carácter cupular, argumentó.
Acerca del retraso en el envío de convocatoria para renovar el mando priista en Baja California, lamentó que el Comité Ejecutivo Nacional, a cargo de Enrique Ochoa Reza, haya estado “dilatando” ese procedimiento. Confió en que por “mandato” del Tribunal electoral del estado y de la Comisión Nacional de Justicia Partidaria se resuelva es omisión.
Adjudicó la “tardanza” a que “los últimos días”, los operadores del partido “han estado inmersos en los actos de campaña” correspondientes a los cuatro estados donde habrá de celebrarse elecciones el próximo 4 de junio.
Mientras que en otras entidades sí “ha habido cambios”; “aquí nos sentimos huérfanos”, deploró.
Se dijo esperanzada de que la convocatoria contemple una votación celebrada por el Consejo Político estatal y que la figura de la “imposición” no determine el esperado relevo.