En marzo de 1999, Dámaso López Núñez, alias “El Licenciado”, sustituyó como subdirector de Seguridad y Custodia de los penales federales de máxima seguridad de Almoloya -en el Estado de México- y de Puente Grande -en Jalisco-, a Juan Castillo Alonso, asesinado el 3 de diciembre del 2000, en su casa, frente a su esposa, hijos y nietos.
Castillo Alonso fue ejecutado un mes antes de la fuga del capo Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias “El Chapo” -compadre de “El Licenciado-, quien se escapó escondido dentro de un carrito de lavandería que pasó por la puerta principal de la cárcel de “máxima seguridad”.
“Parecía enviado” por el Cártel de Sinaloa, ya que López Núñez era “corrupto” y Juan Castillo Alonso “honesto”, según lo relata la investigación periodística plasmada en el libro ‘Los señores del narco’ (2010), de Anabel Hernández Flores.
“El Licenciado” llegó al cargo con todo un equipo proveniente de Sinaloa, cobijados por el entonces director del penal Leonardo Beltrán Santana. Se hacían llamar a sí mismos “Los Sitiabas”, integrados por los comandantes Carlos Fernando Ochoa López, Jesús Vizcaíno Medina y Fidel Roberto García, así como los custodios José de Jesús Carlos Cortés Ortiz, alias “El Pollo”, y José Barajas, “El Veneno”, “todos corruptos de pies a cabeza”, según Hernández Flores.
El nombramiento de López Núñez se dio, casualmente, cuando Francisco Labastida Ochoa era titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), quien renunció a la dependencia un mes después, el 27 de mayo, para ir a contender por la candidatura presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en las elecciones de julio del 2000, las cuales perdió ante Vicente Fox Quesada.
Labastida Ochoa se fue de la Segob, y aunque Castillo Alonso había denunciado la corrupción al interior de Puente Grande, el sucesor, Diódoro Humberto Carrasco Altamirano, respetó los nombramientos hechos por el entonces candidato presidencial priista. Tampoco dijo nada sobre este tema, Miguel Ángel Yunes Linares, entonces coordinador de asesores de la Secretaría de Gobernación y hoy gobernador de Veracruz.
En Sinaloa, “El Licenciado” había fungido con anterioridad como como de la Policía Judicial estatal y ex agente del Ministerio Público local. Fue jefe de investigación de robo de autos, “pero en realidad” trabajaba para el grupo criminal, directamente bajo las órdenes de Ismael Zambada García, alias “El Mayo”.
Su padre, aseguró la periodista en su libro, fue Dámaso López García, un rico “terrateniente” de Culiacán, propietario, entre otros bienes, de “un imponente rancho de seis hectáreas con lago, palapas, capillas, canchas deportivas, y una residencia de lujo”.
El progenitor de “El Licenciado” fue miembro del Consejo Directivo del PRI en la capital sinaloense, y por medio de dicho instituto político tuvo una “relación cercana” con “Juan” [Jesús] Vizcarra Calderón -así lo escribe Anabel Hernández- ex alcalde de Culiacán y aspirante a la gubernatura en las elecciones del 2010, a quien, siempre bajos los dichos de la periodista, “se le atribuye una relación cercana con ‘El Mayo’ Zambada”.
Según el libro ‘Los señores del narco’, “El Licenciado” fue relacionado en las indagatorias de la Procuraduría General de la República (PGR) con la ejecución de Julio Beltrán Quintero, alias “El Julián”, en la avenida principal de Culiacán, junto a 4 agentes en activo de la Policía estatal que lo escoltaban. También el asesinato del empresario Manuel Beltrán Arredondo, dento de un centro comercial de la capital sinaloense.
Fuera de los datos de la investigación periodística antes citada, se presume que “El Licenciado” fue el fundador de “Los Antrax”, brazo armado de la organización criminal que según dirigía después de la última captura de “El Chapo”.
En marzo del 2013, la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, identificó a López Núñez como el principal lugarteniente del Cártel de Sinaloa.
La dependencia estadounidense, señaló que “El Licenciado” llevaba a cabo una “tarea destacada” en las actividades de narcotráfico de “El Chapo” Guzmán y que “jugaba un papel importante” en el lavado de dinero y en el tráfico internacional de estupefacientes.
La OFAC señaló que López Núñez, también conocido como “El Concesionario”, ayudó a Guzmán Loera a fugarse de prisión en 2001, y “Desde entonces se ha convertido en uno de los principales lugartenientes del Cártel de Sinaloa, que es responsable de los envíos de varias toneladas de narcóticos desde México hasta Estados Unidos”, declarando que el producto de sus actividades criminales ascendía a unos 280 millones de dólares.
Según la Procuraduría General de la República (PGR), “El Licenciado” es requerido en extradición por una Corte Federal de Virginia en los Estados Unidos. Dámaso “N”, como le identifican las autoridades oficialmente, es “uno de los principales operadores de estupefacientes y generador de violencia en Sinaloa y el sur de Baja California Sur”.
Además, con la captura de López Núñez “se disminuye la posibilidad de una sociedad entre grupos criminales”, ya que “El Licenciado” trabajaba en una alianza entre integrantes del Cártel de Juárez y del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para enfrentar al Cártel de Sinaloa.
Por su parte, el titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido), Alonso Israel Lira Salas, informó que Dámaso López será consignado primero, por una orden de aprehensión girada por el Juzgado Cuarto de Distrito con sede en Jalisco, y luego se agregará un cargo más por la comisión de delitos flagrantes.