Javier Nava Soria, ex contador de Javier Duarte de Ochoa, detenido el pasado miércoles en Cabrils, Barcelona, España, se negó a ser extraditado a México ante la Audiencia Nacional Española, según lo informaron medios de aquel país.
El mexicano detenido en España supuestamente operó la red de empresas “fantasma” con las que se desviaron y lavaron más de 439 millones de pesos del erario de Veracruz. La Procuraduría General de la República (PGR) le aseguró 16 cuentas bancarias ligadas a esta presunta red de corrupción.
El ex contador de Duarte tiene una orden de aprehensión librada por Gerardo Moreno García, Juez de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio del Centro de Justicia Penal Federal en la Ciudad de México, por los delitos de lavado de dinero y delincuencia organizada.
Ayer, el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray Caso, anunció en Madrid que el Gobierno México solicitará de inmediato la extradición de Nava Soria. En la rueda de prensa conjunta con su homólogo español, Alfonso Dastis, el funcionario mexicano agradeció a España esta captura, y advirtió que se procederá de inmediato a la petición de extradición.
Nava Soria forma parte, según las investigaciones de la PGR, de la red de lavado de dinero para construir empresas “fantasmas” de giro inmobiliario para filtrar ahí los recursos públicos que desvió el gobierno de Duarte, quien fue detenido con fines de extradición el sábado pasado en Guatemala.
En el organigrama de esta red de lavado de dinero, las investigaciones federales señalan que Moisés Mansur Cysneiros, empresario veracruzano, quien señaló en su testamento a Duarte como beneficiario de tres inmuebles en la Ciudad Mëxico.
Javier Nava, Santa Bartolo Acuña y Miguel Velásquez Nieva, las hermanas Nadia Isabel y Elia Arzate Peralta están señalados como accionistas, contadores o representantes legales para desviar recursos públicos e invertirlos mediante compañías “fantasma”.