Ante el anuncio de posibles gasolinazos continuos, un grupo de ciudadanos autodenominado Asamblea Ciudadana de BCS convocó a una reunión de urgencia para evaluar los efectos de esta situación y darla a conocer a los diferentes medios de comunicación.
En su opinión, el adelanto de la liberación de los combustibles significa una tragedia para el Estado, ya que prácticamente todos los productos y servicios dependen del combustible, lo que ha dejado mal posicionados a los pobladores sudcalifornianos, ya que los aumentos se hicieron sentir; claro ejemplo es el que compartieron con ZETA, cuando el fin de semana pasado, un ama de casa acudió al supermercado para constatar:
“El jamón FUD que compramos normalmente subió de 80 pesos a 130, el queso también tuvo un aumento fuerte y ni se diga el pollo”, esto es, ya se empiezan a percibir los estragos de las medidas presidenciales, donde los más afectados son en la “isla” de Baja California Sur.
“Empezando el 30 de marzo con el Estado norte y Sonora, y de esa manera se van a ir regularizando hasta terminar con Yucatán y Quintana Roo este 2017, quiere decir que vamos a tener incrementos todos los días, que se van a hacer ajustes cada hora, porque nuestros referentes son los precios internacionales, el precio del dólar, el precio del crudo, y todo eso nos va a llevar a una dinámica primero de incertidumbre y después de desconcierto”, aseguró Fernando Ángel Ávila, miembro de Asamblea Ciudadana BCS.
Más del 80 por ciento de los productos llegan al Estado del interior de la República, vía marítima o a través de carretera. Por ello la asamblea estalló en contra de la labor de los legisladores locales, ya que solo trabajan para bien parlamentario y no de los ciudadanos.
“Honestamente algo nefasto”, se refirió al trabajo legislativo, “yo creo que tienen que bajarle poquito y ponerse de acuerdo y sustentar, porque no nomás es aprobar y ya, ‘¨¡ah, pues fíjense que nos dejaron de allá y de acá que tenemos que aprobarlo!’, entonces nomás levantan la mano y aprueban, pero realmente se ponen a pensar lo que nos perjudica y lo que no nos perjudica como ciudadano, entonces no nomás es legislar y levantar la mano y decir ‘nos dijeron que esto se aprueba’”, denunció Mireya Polanco, también integrante de la asamblea.
Recordaron que desde el 11 de enero, en una asamblea celebrada en la explanada de gobierno, el subsecretario general de Gobierno, Esteban Beltrán, hizo un compromiso que hasta el momento no ha cumplido. Por otro lado, afirman que la atención del Congreso local es insensible e ineficaz.
“El 11 de enero se tomó una denuncia que firmó el señor Esteban Beltrán. No hemos tenido una respuesta del Congreso, porque ya fuimos a decirles, ‘les toca tocar la puerta en el Congreso de la Unión, hacernos fuertes al Estado, ya dimos respuesta, ahí está lo que ustedes solicitaron, el estímulo fiscal para que nos dé respuesta el Congreso de la Unión. Nos pueden dar fecha de entrega, está abierta’”, lamentó Eva Castillo, quien hizo un llamado a los diputados que se dicen a favor de la población.
Y es que los diputados en campaña siguen en las calles, llevando despensas, verdura y recorriendo las calles tomándose fotos, sin embargo, la verdadera atención a problemas y situaciones que urgen a Baja California Sur, no se hace presente ni siquiera con empatía, lo cual demuestra el desinterés por atender los intereses de la población.
