Según los Indicadores de ocupación y empleo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) para enero de 2017, la tasa de desempleo nacional bajó, pero las tasas de ocupación en el sector informal y subocupación subieron.
En dicho mes, la tasa de desocupación nacional fue del 3.6 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA), porcentaje 0.1 por ciento menor al del mes anterior y 0.6 por ciento menor respecto al mismo mes del 2016. En contraparte, la tasa de informalidad laboral fue de 57.2 por ciento en enero de 2017, porcentaje 0.5 mayor al mes anterior, que fue de 56.7 por ciento.
La tasa de desocupación mide el porcentaje de la PEA que no trabajó siquiera una hora durante la semana de la encuesta, pero dijo tener disposición para trabajar e hizo alguna actividad por obtener empleo. Por otra parte, la tasa de informalidad se refiere a la población ocupada que es laboralmente vulnerable, porque su vínculo laboral no es reconocido por su fuente de trabajo.
Por otra parte, la tasa de ocupación en el sector informal, que se refiere a la población ocupada en unidades económicas no registradas y que funcionan con recursos del hogar o de la persona, que no es una empresa, fue 0.3 por ciento mayor respecto al mes anterior con 26.8 por ciento.
La tasa de subocupación, que es el porcentaje de la población ocupada que tiene la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación le demanda, se ubicó en 7.2 por ciento, 0.3 por ciento más respecto al mes anterior.
EN BC LOS SALARIOS “SON MUY BAJOS”
Según el diario de circulación nacional El Economista, en el estado de Baja California, creció el empleo pero con salarios bajos, ya que de la población ocupada del estado (1.6 millones de personas), 31.9 por ciento recibe de dos hasta tres salarios mínimos solamente.
Esto a pesar de que la entidad ocupa el segundo lugar nacional en generación de empleos formales durante enero de este año, con la apertura de 10 mil 898 nuevas plazas aseguradas en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sólo detrás de Nuevo León, de acuerdo con datos de la Secretaría de Desarrollo Económico estatal.
Sin embargo, “la queja recurrente”, indicó el medio especializado, es que los salarios de estos empleos oscilan entre los 1,200 y 1,500 pesos semanales, insuficiente para hacer frente al crecimiento en los precios al consumidor, que en los casos de Mexicali y Tijuana alcanzó 6.34 y 6.55 por ciento anual en la primera quincena de febrero del 2017.
Además, señala el rotativo, “se suman otros factores que merman el mercado laboral”. El primero es el salario diario asociado a trabajadores asegurados en el IMSS en la entidad, que en enero del presente año aumentó 1.89 por ciento a tasa anual, el menor nivel en 14 meses.
El segundo, según datos del Inegi, de la población ocupada de BC (1.6 millones de personas), 31.9 por ciento recibe de dos hasta tres salarios mínimos, 21.6% de uno a dos y 4.9%, hasta un salario mínimo, mientras que sólo 8.3% de los ocupados recibe más de cinco salarios mínimos.