17.4 C
Tijuana
miércoles, octubre 16, 2024
Publicidad

La La Land

Damien Chazelle supera aquí su hazaña de “Whiplash”, al escribir y dirigir otra historia en torno al costo de los sueños. Es decir, cuando uno se traza una meta debe estar consciente de lo que implica alcanzarla, aunque en ambos casos los personajes no parecen tener alternativa, pues son esclavos de sus vocaciones y de sus dones.

Ahora estos protagonistas son Mia (Emma Stone), una actriz sin suerte; y Sebastian (Ryan Gosling), un brillante jazzista que aparentemente está más salado que la chica.

O será que el contexto es la ciudad devoradora de talentos, es decir, Los Ángeles; vaya punto de partida para estos artistas en ciernes que el destino acerca y de ahí parte un musical donde la nostalgia se pone de moda y nos ubica en un presente lleno de buena vibra.

En pocas palabras esta cinta lo tiene todo: una historia estupendamente narrada y un musical romántico bien armado, como en las películas de antaño. Y no es precisamente que Chazelle le esté rindiendo un homenaje al género, más bien lo está reinventando a partir de una tradición que no tiende a desaparecer. Al menos no por lo que vemos aquí.

Stone y Gosling está en su mejor momento, con sus habilidades tanto histriónicas como dancísticas, dignas de todas las nominaciones y reconocimientos que seguramente habrán de venir. Es impresionante ver el nivel de empatía que logran y a la vez no hay nada forzado aquí, sus papeles son convincentes en la manera que reflejan el dolor del fracaso continuo, en espera de esa oportunidad que debe estar por ahí, perdida entre tanto oropel.

Al final todo es buen humor, y al principio también, pues el tono sombrío de “Whiplash” no tiene cabida en esta nueva entrega de Chazelle que se vuelve irresistible, vibrante, alegre, vaya, sin rayar en lo cursi ni en lo artificioso. Es, entonces, un placer para los sentidos, sin clichés, con puro arte, original y sin margen de comparación. ****

Punto final.- “Sing” es una buena manera de cerrar el año. Al estilo “Despicable Me”, pero más sarcástica… si se puede decir.

Autor(a)

Gabriela Olivares
Gabriela Olivares
gabriela@zeta.com
- Publicidad -spot_img

Puede interesarte

-Publicidad -

Notas recientes

-Publicidad -

Destacadas