Tan solo del Ramo 33 se estima que el alcalde desvió 178 millones 938 mil 077 pesos, pero sumando la totalidad de otras partidas, podrían ser 280 millones de pesos en juego, confirmó el actual presidente municipal, Marco Antonio Novelo
Si durante la segunda mitad de su trienio (2010-2013), el ex alcalde de Ensenada, Enrique Pelayo Torres, desvió recursos del Ramo 33 -por lo que se intentó fincarle juicio político-, su sucesor, Gilberto Hirata Chico, también priista, hizo del mismo delito una práctica común en cada uno de los años de su gestión.
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Pero no solamente del mencionado programa federal echó mano, también de otras partidas federales como el Programa Fortalece, entre otros proyectos de obra del propio municipio.
Solamente del Ramo 33 se estima un desvío de 178 millones 938 mil 077 pesos, pero sumando la totalidad de otras partidas, se estima en 280 millones de pesos, cantidad corroborada por el actual presidente municipal, Marco Antonio Novelo.
Durante el primer año de la administración de Hirata, correspondiente al ejercicio 2014, había un total de 107 obras programadas, solamente se concluyeron 52, quedaron iniciadas 35 e inconclusas 20, lo que suma un desfalco por 37 millones 655 mil 986 pesos.
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En 2015, de 89 obras programadas del Ramo 33, se concluyeron solo 20, 35 quedaron “a medias” y 34 ni siquiera las arrancaron. El presupuesto desviado ascendió a 51 millones 636 mil 460 pesos.
2016 fue el acabose. En la recta final del XXI Ayuntamiento, el dinero sin rastro llegó a los 89 millones 645 mil 630 pesos, no se concluyó ni una sola obra de las 89 etiquetadas, arrancaron ocho, pero el resto, 81, no pasaron más allá del escritorio.
El desvío “prácticamente fue una política de gobierno de la anterior administración”, aseveró el regidor petista Orlando Toscano, presidente de la Comisión Especial para el estudio, análisis y propuesta del Programa Ramo 33, instalada apenas el 6 de enero de 2017. El destino del dinero se presume fue el gasto corriente, como pago de nómina y a proveedores, pero solo es eso, presunción, pues existen muchas ambigüedades.
Dicha Comisión se creó a partir del punto de acuerdo presentado en Cabildo por Toscano, quien también preside la coordinación de la Comisión de Hacienda y Patrimonio Municipal, que integrará ese organismo colegiado, al igual que la síndico procuradora, la tesorera municipal, el director de Comité de Planeación para el Desarrollo Municipal (COPLADEM), así como los regidores coordinadores de las comisiones de Desarrollo Social; Obras y Servicios Públicos; Hacienda y Patrimonio Municipal; Transparencia.
Ante el desbarajuste y ambigüedad en torno a las obras programadas y no ejecutadas, la primera tarea de la Comisión es esclarecer conceptos y montos, porque incluso entre unas dependencias y otras hay diferencias al hacer el recuento de los daños.
Pero sobre todo se buscarán alternativas, determinar la factibilidad legal y financiera para concluir las obras, modificarlas o cancelarlas, según sea el caso. “Lo principal es cumplirle a la gente, de manera transparente y responsable poder decirles qué va a pasar con la obra, habrá algunas que a lo mejor ya no podrán llevarse a cabo, tenemos que hablarlo de frente, no nos queda de otra, a nosotros nos tocó pagar los platos rotos”, expuso el edil.
Son 285 obras en total, “a ojo de buen cubero”, expresa coloquialmente el regidor Toscano, ante la incertidumbre de las partidas etiquetadas, aprobadas, con estudios técnicos y con todo listo para ejecutarse pero sin archivo o expediente, porque algunas ni siquiera están contratadas, aparentemente.
Teodoro Araiza Castaños
Se contempla que hasta tres meses podría llevar la recaudación de información y el diagnóstico para que la Comisión especial emita una propuesta: “El problema es que hay mucha documentación que ni encontramos, los proveedores son los que nos la están dando, de repente hay veinte contratos que se hicieron, pero tenemos una fila de 25 afuera, reclamando”.
Pero el compromiso de tal Comisión hasta allí llegará, el reportar, pero no fincar responsabilidades ni sancionar, “ni tendría facultades para hacerlo, ni siquiera sugerirlo, porque están las instancias correspondientes que también tienen que hacer su trabajo, en caso de que haya responsables, que debe haberlos, supongo”.
La Sindicatura Municipal encabezada por Laura Karina Castrejón deberá tomar el caso, pero solamente para determinar el comportamiento y si se incurrió en una irresponsabilidad por parte del servidor público, no así para fincar delito o sancionar. En todo caso invitará a la Auditoría Superior de la Federación a que tome cartas en el asunto
“Por tratarse de recursos federales a quien le corresponde auditar y sancionar el desvío es a la ASF, a través de la Procuraduría General de la República (PGR), esa es la instancia y es el camino”, estableció.
Pero las auditorías de la ASF son prácticamente aleatorias, no audita todos los programas ni a todos los municipios del país, e incluso ha habido ejercicios que, en Baja California, ni siquiera el Ramo 33 ha sido auscultado, por lo que en este caso la instancia necesitaría “un empujoncito”, refirió Toscano.
“Hablar de 178 millones de pesos en el contexto nacional y de muchos otros municipios a lo mejor no es gran cosa, no les resulta ‘atractivo’, aunque para nosotros represente muchísimo dinero, ya quisiéramos tener eso para hacer la obra. Por ejemplo la ASF fue de las primeras que señaló los hechos en Veracruz, pero ahí estamos hablando de 40 mil millones de pesos, o en Sonora, por 30 mil millones, nada que ver con el monto de acá”.
Sin embargo, acota el regidor, hablando de legalidad, lo mismo es un peso que un millón, pues se trata de un quebranto a la Ley.
Que pague quien tenga que pagar
El regidor Teodoro Araiza Castaños, de Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), afirmó que aún no le envían información sobre la investigación hasta el momento, pero como ha sido la constante desde que inició la actual administración, ésta les ha llegado a cuentagotas y a veces se han enterado primero por los medios de comunicación.
El también miembro de la Comisión de Transparencia e integrante de la Comisión Especial para el Ramo 33,dijo estar a la espera de la primera sesión de la Comisión Especial, pues su instalación por lo pronto es un mero trámite y ya necesitan entrar de lleno al tema, lo importante es que se pretende establecer mecanismos y candados para que en este Ayuntamiento se cree un precedente y no caer en la tentación de utilizar los recursos federales para el gasto corriente y pago de nómina, que absorbe el 90 por ciento del presupuesto total.
Orlando Toscano
“No pretendemos que el trabajo de esta Comisión se alargue y que pasen los tiempos para que Sindicatura haga su trabajo. La Comisión no puede ejercer funciones punitivas a quien haya incurrido en alguna falta administrativa, pero sí podemos coadyuvar, participar y presionar para que el órgano competente tome las medidas pertinentes”, planteó Araiza.
“La ciudadanía tiene una exigencia muy válida, y es que paguen los que tengan que pagar, pues la realidad es que en la propuesta de Ley de Ingresos que planteó el alcalde Novelo y su equipo, los que están pagando los platos rotos al final de cuentas es la ciudadanía y el reclamo es por qué nosotros tenemos que pagar lo que otros disfrutan o se llevan”.
Refirió que con Pelayo pasó lo mismo, el desfalco es práctica común en cada administración y nunca se fincan responsabilidades, por lo que como consecuencia, ahora la administración municipal está colapsada.,
“Con decirte que al día de hoy los regidores no hemos ejercido un solo peso del presupuesto que se tiene asignado, no ha habido partidas para gestión social y para nada. De alguna u otra forma ha sido solidaridad con la administración central, se está dando prioridad al pago de sueldos y aguinaldos a los trabajadores, pero el dinero que debería estar destinado a becas y ayudas sociales, no está llegando a los regidores”, manifestó Araiza.
Para la Comisión de Transparencia la prioridad es brindar información a la ciudadanía sobre la situación en que se encuentra la administración pública municipal, que realmente funcione su portal, donde detalladamente se conozca la situación de la deuda, cómo se gasta y de cuántos son los sueldos. Y de igual manera, trabajar en la actualización del Reglamento de Transparencia.
Gilberto Hirata Chico
“Anteriormente esta Comisión no había tenido frutos porque probablemente no les interesaba a las administraciones pasadas, pero ahora estamos apostando a que en este Cabildo se llegue a un consenso. Se está apostando para que se baje el gasto corriente, el presupuesto destinado a servicios personales, que se invierta más en inversión pública, al combate a la desigualdad y la pobreza, que esta Comisión no se forme solamente para tratar de desviar el tema, sino que realmente obtenga un resultado, que se señale nombre y apellido de los responsables del desvío de recursos y en dónde se encuentra ese dinero”.Respecto al sesgo político que se le podría dar a los resultados que arrojen los trabajos de la Comisión Especial, dado a que tanto la administración pasada como la actual, así como la mayoría del Cabildo es de extracción priísta, el regidor morenista dio el beneficio de la duda a los funcionarios del actual Ayuntamiento, pero, “al día de hoy no hemos visto avances”.
Por su parte, la síndico procuradora ha explicado que están integrando los expedientes de forma minuciosa, de tal forma que no se pueda revertir el proceso en caso de existir lagunas en la información, y así evitar lo que sucedió con el caso Pelayo, quien libró el juicio político.
“Creo que ya llegó el momento de presionar, ya les dimos la oportunidad de que se instalaran, conocieran el área, de que se empaparan, que hicieran sus auditorías, ya es tiempo de que nos informen de los avances de esas investigaciones”, remató el regidor Araiza.
Mientras que Toscano, quien preside la Comisión Especial, negó rotundamente que los resultados de todo esto vayan a tener un tinte o interés político o partidista: “Yo te puedo asegurar totalmente que la información va a fluir de manera transparente”.
La demora, reiteró, es que Tesorería sigue descubriendo más deudas cada día, más proveedores reclamando, “partiditas” por aquí y por allá, pero juntas suman buena cantidad, “sí nos va llevar un poco de tiempo unificar criterios”.
