La primera catorcena, parte del aguinaldo y un bono para el personal de base son los compromisos a los que tiene que hacer frente el XXII Ayuntamiento de Tijuana a más tardar hoy viernes 9 de diciembre, lo que representa alrededor de 379 millones de pesos, siendo que la administración saliente solo dejó disponible en las arcas municipales 34 millones de pesos, informó el Tesorero Ricardo Chavarría Morales.
Comentó que si bien en las cuentas del Ayuntamiento se encontraron 194 millones de pesos, la mayor parte de estos recursos se encuentran etiquetados, principalmente para obra del Ramo 33, por lo que no puede disponerse del mismo.
Chavarría hizo un llamado para exponer esta situación ante medios de comunicación, luego de que su antecesor en dicho cargo, José Manuel Noriega, declarara públicamente que la administración se entregó con 473 millones de pesos disponibles para el pago de dichos compromisos, además de las participaciones federales y estatales que llegarían durante diciembre al gobierno municipal.
Chavarría argumentó que dichas participaciones se recibirán en el mejor de los casos hasta el 15 de diciembre, asegurando que ya se están realizando las gestiones correspondientes para agilizar este trámite, sin embargo, tan solo se esperan 240 millones de pesos, lo que no sería suficiente para cumplir con el pago a los más de 9 mil empleados.
Agregó que además no se cuentan con los recursos para cumplir con otros compromisos próximos, como lo es la nómina del 23 de diciembre por 92 millones de pesos y la correspondiente al 6 de enero por 208 millones de pesos –dado que contempla el segundo pago de aguinaldo-, además de pasivos por más de 300 millones de pesos entre proveedores, laudos y retenciones de impuesto sobre la renta (ISR) y cuotas de ISSSTECALI que no se han reportado desde octubre, lo que da un total cercano a los mil millones de pesos.
Por esta razón es que a Cabildo se solicitó la aprobación de una línea de crédito por la cantidad de 200 millones de pesos, esperando que no se tenga la necesidad de utilizarla, además de la solicitud para recibir un anticipo por 490 millones 999 mil 778 pesos de las participaciones federales correspondientes al presupuesto de 2017, con cargo a dicho ejercicio fiscal, déficit que obligaría al gobierno municipal a tomar medidas restrictivas y de austeridad.
Chavarría comentó que al momento no puede hablarse de irregularidades en el manejo de los recursos por parte de la anterior administración, aunque se solicitará la participación de la Sindicatura Procuradora para realizar una auditoría respecto a la actuación del anterior tesorero. ZETA buscó la versión de Noriega, sin recibir respuesta.
La tarde del 7 de diciembre se llevó a cabo la primera sesión extraordinaria del Cabildo del XXII Ayuntamiento de Tijuana, encabezada por el Presidente Municipal Juan Manuel Gastélum Buenrostro, misma en que no solo se discutió ampliamente sobre las solicitudes de línea de crédito y adelanto en las participaciones federales propuestas por Chavarría, sino incluso sobre el Presupuesto de Egresos para 2017 del gobierno municipal.
Sobre el presupuesto, los regidores de oposición a la mayoría panista señalaron inconsistencias entre la información recibida con anterioridad a la sesión y las cifras manejadas durante la misma, además de que la premura del tiempo –tiene que presentarse al Congreso del Estado el 10 de diciembre- obligó a considerar un presupuesto casi idéntico al de 2016, con los mismos vicios de este, expuso el regidor independiente Roberto Quijano.
Con 13 votos a favor y 4 en contra, el Presupuesto de Egresos para 2017 quedó en poco más de 2 mil 914 millones de pesos, si bien se acordó que se trabajarán modificaciones al mismo durante el próximo mes de enero.
La solicitud para la aprobación de una línea de crédito también resultó controvertida, argumentado el regidor del PES Manuel Rodríguez Monarrez que siendo Tijuana la ciudad más endeudada del país, con un pasivo de 2 mil 700 millones de pesos, podría incluso convenir que el Ayuntamiento se declare en bancarrota y esperar ser rescatados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El regidor de MORENA Marco Antonio Romero Arizpe se opuso porque el presupuesto para 2017 no contempla el pago de dicha línea de crédito. Comentó que de las deudas que tiene la ciudad, la menor de ellas es por 200 millones de pesos, con un plazo de pago hasta el año 2029.
Otros regidores como Quijano y Mónica Vega del PES se opusieron a esta línea de crédito señalando desconocer los rubros que justificaran la misma, además de la institución bancaria a la que se solicitaría la misma y la tasa de interés aplicable. La solicitud de línea de crédito se aprobó con 10 votos a favor y 7 en contra, insistiendo la fracción panista en la premura del tiempo para cumplir con los pagos a los trabajadores.
El adelanto en las participaciones federales propuesto fue aprobado con tan solo un voto en contra y sin mayor discusión, señalando que el déficit que esto supondría puede resolverse en las modificaciones que se realicen al presupuesto de 2017 el próximo mes.