Miguel Ángel Yunes Márquez, alcalde de Boca del Río, mostró a través de un video en su cuenta de Facebook, los lujos y excentricidades de la Casa Veracruz, la residencia oficial y despacho alterno que utilizó el mandatario interino Javier Duarte de Ochoa, quien antes de pedir licencia y huir, envió al Congreso estatal una iniciativa para donar este inmueble.
El también hijo del Gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares, denunció “saqueo” y “rapiña”, al tiempo que filmó el interior de la residencia oficial que habitó, durante su administración, el ahora prófugo de la justicia Duarte de Ochoa, y que mide 6 mil metros cuadrados.
En esta residencia, que a la entrada tiene un enorme candelabro, habitaron Fernando Gutiérrez Barrios (1986-1988), Dante Delgado Rannauro (1988-1992), Patricio Chirinos Calero (1992-1998), Miguel Alemán Velasco (1998-2004), Fidel Herrera Beltrán (2004-2010), y Duarte de Ochoa, del 2010 hasta hace menos de un mes.
“En un estado tan pobre como Veracruz, creo que los gobernantes deben de tener prudencia, al final de cuentas, esta casa es de todos los veracruzanos, hay que ver qué es lo que se hace con ella”, criticó Yunes Márquez.
Extensos jardines con flores -entre ellas orquídeas-, sistema de riego automático, pavorreales, conejos, caminos empedrados, columpios, una pequeña palapa, una fuente con peces de colores, cine privado con 21 butacas y máquina para hacer palomitas, salones para recibir a invitados especiales, lavabos con acabados de mármol, y hasta una gran cava con capacidad para 135 vinos con aire acondicionado, ahora vacía y cubierta de polvo.
La Casa fue tomada por los alcaldes de los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), en protesta porque la administración estatal del gobernador interino Flavino Ríos Alvarado no ha pagado 3 mil 800 millones de pesos de recursos federales destinados a los municipios.
Ríos Alvarado desapachaba en edificio, dentro de la propia Casa Veracruz, acondicionado para oficinas, en el que destacan el un cuadro de Jesús Reyes Heroles, una fotografía del presidente Enrique Peña Nieto, y una mesa oval. El recinto fue sede de la reunión del domingo entre el gobernador y algunos alcaldes, que terminó en la ruptura del diálogo y la ocupación de la residencia oficial.
Ahora se sabe que detrás de la sala de juntas, hay un privado para dos personas, con paredes acojinadas que aíslan el sonido. Una especie de “búnker”, dijeron los alcaldes. También se observan los soportes para pantallas de televisión, pero sin los aparatos, además de paredes vacías, sin cuadros ni pinturas, todo extraído en su totalidad.
En el edificio principal se observan muebles viejos, deteriorados, sacados de las bodegas, con manchas de humedad. En el comedor, la mesa está puesta, con cubiertos de plata, y cada plato tiene el escudo de Veracruz. Mientras que en la habitación en la que pernoctaba el mandatario, sólo se encontró la base de una cama y un colchón, rodeados por algunos indicios de otros muebles.
También hay libros, señaló el diario Milenio, en su mayoría de gobierno. Sobresale uno, dice el rotativo: “Veracruz. La puerta de México. Las cosas bien hechas”, realizado por la oficina de Programa de Gobierno en 2013, y cuyo comienzo de prólogo es: “A cada generación le corresponde forjar su presente y dejar el legado por el que serán recordadas sus acciones”.
Hay sistema de circuito cerrado de televisión, termómetros ambientales, y en algunas habitaciones la luz se activa con sensores de movimiento, dice el diario La Jornada, a la cual los alcaldes le permitieron un recorrido de la residencia.
El dirigente estatal del PRD, Rogelio Franco Castán, se pronunció en contra de las condiciones de la residencia, al asegurar que antes destacaba con lujosos muebles y obras de arte, que por su alto valor, contrastaban con la pobreza de gran parte de la entidad.
FLAVINO RÍOS ATENDERÁ ASUNTOS PÚBLICOS DESDE SU DOMICILIO PARTICULAR
Ante la toma de la Casa Veracruz por parte de LOS alcaldes panista y perredistas que reclaman al gobierno estatal les entregue recursos federales que tienen retenidos, el mandatario estatal aseguró que realizará actividades oficiales en su domicilio particular. Flavino Ríos dijo que “no es necesario el Palacio para gobernar”.
Por otra parte, el gobernador interino afirmó que cuenta con tres carpetas de investigación en contra de un igual número de exsecretarios de Finanzas del gobierno estatal y dos más en contra de dos extesoreros que laboraron durante la administración de Duarte de Ochoa, para esclarecer el desorden financiero del estado.
En entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva, insistió en que él y su secretario de Finanzas, Antonio Gómez Pelegrín, “no han robado ni un solo centavo” del erario público y abundó que se actúa con base al derecho para que se proceda legalmente en contra de quienes resulten responsables.
Sostuvo que el Gobierno del Estado y los municipios deben “apretarse el cinturón” para salir adelante del problema financiero que afecta a los veracruzanos, y precisó que se puede respaldar a los municipios con recurso para los gastos corrientes, pero no para el desarrollo o continuidad de obra pública.