Al menos seis meses más podría demorar un juez en resolver la posible libertad del fundador de las autodefensas michoacanas. La PGR interpuso un recurso de revisión en contra del amparo que le fue otorgado por un Tribunal Unitario. El traslado de Mireles Valverde, del penal federal de Hermosillo al Cefereso número 4 en Nayarit, en nada remedia sus males físicos. Será compañero de prisión de los ex miembros del CAF Ángel Jácome “El Kaibil” y de Miguel Márquez Treviño “El Micky”
Aunque ya se encuentra en una prisión más cercana a su tierra, el ex líder de las autodefensas en Michoacán, José Manuel Mireles Valverde se mantiene bajo zozobra, luego de que la Procuraduría General de la República impugnara el amparo que ordena analizar una vez más la solicitud de sobreseimiento de su causa penal.
El Primer Tribunal Unitario del Décimo Primer Circuito con residencia en Morelia recibió un escrito firmado por la licenciada Laura Lucía Venegas González, agente del Ministerio Público Federal adscrita, mediante el cual interpone recurso de revisión en contra de la resolución dictada a favor de Mireles el 10 de octubre anterior.
Con este recurso, el expediente del luchador social será enviado en fecha próxima ante un Tribunal Colegiado en Materia Penal en el estado de Michoacán para que confirme, modifique o revoque el fallo del magistrado unitario, lo que podría demorar de cuatro a seis meses más la situación de prisión preventiva del personaje.
De confirmarse el amparo otorgado a Mireles existe la posibilidad de que se apliquen en su favor las reformas a las excluyentes del delito contenidas en las fracciones II, V y VIII, del artículo 15 del Código Penal Federal y se decrete el sobreseimiento de la causa penal que enfrenta por delitos contra la salud –en su modalidad de narcomenudeo– y portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, ante el Juzgado Quinto de Distrito en Michoacán.
José Manuel Mireles fue trasladado la mañana del martes 1 de noviembre del penal de máxima seguridad número 11, en Hermosillo, Sonora, hacia el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 4, “Noroeste”, ubicado en El Rincón, Nayarit, luego de que el propio interno y sus familiares solicitaran al juez de la causa la reubicación a un reclusorio más cercano a su domicilio.
Una semana antes, un juez de distrito en Michoacán, otorgó la libertad provisional bajo caución a 70 miembros de las autodefensas que fueron detenidos junto a Mireles Valverde el 27 de junio de 2014, tras un operativo del Ejército Mexicano cerca de la comunidad de Acalpican, en el municipio de Lázaro Cárdenas, acusado del delito de posesión de armas de uso exclusivo del Ejército Mexicano, mas no por delitos contra la salud.
La reubicación penitenciaria del fundador del movimiento para combatir al crimen organizado en su entidad, ante la ausencia de acciones de los diferentes niveles de gobierno y el embate del cártel de los Caballeros Templarios en los primeros años de la década, es considerada como positiva por sus parientes, aunque no dejan de reconocer que el Cefereso 4 es uno de los peores del país, junto con el número 11 de Hermosillo.
Y es que efectivamente, mientras que el penal de máxima seguridad de Sonora tiene dos recomendaciones emitidas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) por la mala alimentación y falta de servicios para los internos, el Cefereso “El Rincón” de Tepic cuenta con una recomendación (13/2016) por la deficiente prestación de atención médica.
Cada semana, los reos del penal federal nayarita interponen decenas de demandas de amparo en los tres Juzgados especializados en la materia reclamando la inapropiada atención a sus síntomas y malestares, carencia o negativa de proporcionarles medicamentos y consultas deficientes.
Según informes de abogados, familiares y amigos, el médico de profesión padece diversas enfermedades, entre ellas, un disco herniado, lo que le ha ocasionado problemas para caminar y le obliga a permanecer buena parte del día recostado.
Al último día de julio, el Cefereso 4 “Noroeste” contaba con una población carcelaria de 2 mil 993 internos, 801 menos de su capacidad. Entre sus huéspedes más conocidos están los hermanos Jacobo y Ángel “El Kaibil” Jácome Gamboa, Miguel Ángel Márquez Treviño “Micky”, Javier Guerrero Covarrubias “El Javi” y José Joaquín Castillo Coronel, pertenecientes a diversos cárteles de la droga.
“El Kaibil” delicado de salud
Considerado como uno de los más sanguinarios sicarios del Cártel Arellano Félix, Ángel Jácome Gamboa “El Kaibil” ha pasado los peores años de su vida recluido en el penal de máxima seguridad de Tepic, Nayarit, donde sus demandas de atención médica son constantes.
Debido a que su estado de salud es precario, en más de alguna ocasión, los jueces de distrito le han concedido la protección de la Justicia de la Unión para que le sean realizadas las consultas, dictámenes, intervenciones quirúrgicas y suministro de medicamentos que requiere.
El último de los amparos otorgados a “El Kaibil” ordenó a las autoridades penitenciarias federales que le atendieran de urgencia: “realizar de inmediato, en el ámbito de sus atribuciones, las gestiones necesarias para que al quejoso se le realice un uretrograma para ver condiciones de la uretra peneana y la ureta psoattica y se le aplique un injerto heterólogo más proteína ósea, morfogenética con la finalidad de conseguir la consolidación ósea”.
El fallo confirmado –luego de una impugnación– por el Segundo Tribunal Colegiado con residencia en Tepic obligó al cumplimiento de lo ordenado. Las autoridades penitenciarias quedaron en el entendido de que una vez ejecutadas las acciones dictadas tendrían que remitir constancias que acreditaran haber cumplido con la sentencia de amparo.
El 16 de octubre próximo pasado, la Directora Jurídica en suplencia del Director General del Centro Federal de Readaptación Social número 4 “Noroeste”, envió copias certificadas de las constancias entre las que se anexa una nota postoperatoria de la que se desprende “la aplicación de un injerto heterólogo más proteína ósea, con motivo de una fractura de húmero diafisiario tercio medial discal” sufrida por Jácome Gamboa.
Actualmente, de acuerdo a la información proporcionada por la autoridad carcelaria y los estudios radiológicos realizados, el recluso se encuentra estable y en franca mejoría de salud. Por su parte, “El Kaibil” y su hermano Bartolo, continúan interponiendo demanda de amparo en contra de los presuntos deficientes servicios médicos del penal federal. Redacción ZETA