Estudiantes matriculados en diferentes carreras de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) protestaron la tarde de hoy viernes 11 de noviembre en los centros del Gobierno del Estado de Tijuana, Mexicali y Ensenada con una exigencia muy particular: que la administración encabezada por el gobernador Francisco Vega de Lamadrid pague a la Máxima Casa de Estudios los 476 millones de pesos que le debe. El grupo se autodenominó: “Estudiantes en Defensa de la Universidad Pública”.
“Como universitaria es un tema que me compete, no solo me afecta el gobierno, sino que a corto plazo va a haber resultados negativos en la Universidad”, dijo a ZETA Andrea Valenzuela, estudiante de la Facultad de Economía y Relaciones Internacionales.
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Los jóvenes fueron atendidos por Enrique Méndez Juárez, subsecretario de Gobierno
Uno de los líderes del movimiento, Luis Carlos Haro, manifestó que los estudiantes han logrado recolectar alrededor de mil firmas que serán presentadas personalmente al gobernador del Estado, como medida de presión a las autoridades a hacer ese pago y poder agilizar las finanzas universitarias, y de esa manera evitar un inminente aumento en las cuotas y derechos que pagan los alumnos semestre a semestre; además de obligarlos a ejercer la venta de boletos del Sorteo UABC. Manifestó que “esto no se acaba aquí” sino que continuarán las movilizaciones pacífica hasta que el gobierno cumpla con la Ley que le obliga a ministrar ese dinero a la UABC.
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Posteriormente, el subsecretario del Gobierno Estatal en la ciudad, Enrique Méndez Juárez, se acercó a quienes formaron parte de la protesta, y les explicó que “se instaló una mesa de trabajo en donde participa el secretario general de Gobierno (Francisco Rueda), de Planeación y Finanzas (Antonio Valladolid) y de Educación (Mario Herrera) y con el rector de la UABC (Juan Ocegueda)” para discutir las formas en que se pagará a la institución educativa.
“Los recursos públicos son fiscalizables y hay una Ley de Transparencia que nos rige. Estamos en la etapa de diálogo, de conciliar las cantidades de los recursos que se les van a otorgar a la UABC”, dijo el funcionario a los estudiantes, mientras estaba acompañado de algunos de sus subordinados. Posteriormente, recibió una carta de exposición de motivos de la movilización de parte del alumnado. Fue enfático al decir que si bien su trabajo es atender a los jóvenes inconformes, él no es el responsable de conocer la situación respectiva a la deuda, por lo que no contestó preguntas técnicas en el evento aunque sostuvo que “el Estado está preocupado por esa situación”. A Méndez Juárez se le exigió que la autoridad dé acceso a los alumnos a las reuniones entre la UABC y el gobierno.
“Kiko ratero, ya paga ese dinero” y “Estudiantes unidos jamás serán vencidos”, fueron algunas de las consignas empleadas esta tarde. Haro destacó la importancia de la unidad estudiantil en todo Baja California, ya que no solo se va a afectar la matrícula, sino también se van a recortar plantas docentes y planes de estudios. “No podemos permitir que la universidad sea mutiliada por el Gobierno del Estado”, recalcó.
No obstante que la población estudiantil de Tijuana supera los diez mil, la movilización para exigir recursos al gobierno del Estado fue muy pequeña, se trató de un grupo menor a 20 estudiantes que se hicieron presentes poco después de las 14 horas, con pancartas, una lona y un megáfono para expresar sus consignas:
“Es lamentable la falta de participación política de los alumnos. Los maestros no han tocado este tema en específico, no ha sido un tema de los maestros”, replicó Andrea. Algunos de los presentes lamentaron que las sociedades de alumnos de cada una de las facultades no han tenido iniciativas para defender a la comunidad universitaria.
Por su parte, Josué Valenzuela, estudiante de sociología, reportó que las autoridades universitarias han dificultado las movilizaciones dentro de las instalaciones del campus, lo que incentiva el miedo entre la población estudiantil e inhibe cualquier acción en contra de la mala administración de los recursos públicos por parte del gobernador.
La deuda, dijeron, afecta cursos y actividades extracurriculares, principalmente en las Facultades de Deportes e Idiomas, por lo que ambas unidades académicas son de las más interesadas en que se cubra el adeudo. Otro de los reclamos que hicieron los estudiantes durante la movilización están relacionados con el incremento de la violencia en Tijuana, y las propiedades inmobiliarias que presuntamente ha adquirido Vega de Lamadrid durante su gestión como gobernador, que inició en diciembre de 2013.
