Al titular de la SEP, Aurelio Nuño, se le atribuye la paternidad de la Reforma Educativa, que inicialmente buscaba sancionar a los maestros que no acreditaran una evaluación, con despojarlos de su plaza base de su trabajo, aunque tuvieran toda una vida y estuvieran a punto de jubilarse.
Motivo por el cual, movió el avispero magisterial, porque nadie en su sano juicio, aceptaría tan fascista cuan absurda determinación, porque la política, planes y programas educativos, los impone el gobierno en turno. Las escuelas normales, son autorizadas y preparan al profesorado de acuerdo a esa política educativa.
Los exámenes parciales y finales los autoriza el gobierno. Títulos, Cédula Profesional y demás documentos los valida, firma y sella la autoridad educativa e incluso los mismos gobernadores de los estados. Para que luego salgan con que los profesores no estamos bien preparados, siendo que los maestros somos producto de la política educativa que nos impone la SEP y nunca nos negamos a acatar la orden de tomar cursos de actualización que dicta la autoridad educativa.
Además, el gobierno siempre busca y encuentra al culpable de los problemas, nunca se autoevalúa. La educación tiene muchos actores, pero prefirieron culpar a los maestros. Pretenden ignorar que no hay escuelas, salones, cupo, ni oferta educativa suficiente, que no les pagan a los maestros en tiempo y forma.
Desde siempre mandan al maestro a zonas alejadas a trabajar, pero su primer pago lo viene recibiendo entre 5 a 6 meses después. No les importa cómo se trasladan a esos lugares distantes, ni cómo le hacen para comer, vestir, hospedarse, etc. Por otra parte, la política económica es que le paguen a la gente salarios de esclavos, que tengan que trabajar ambos cónyuges para medio comer, pagar impuestos y malos servicios, dejando a los hijos sin quien se cerciore que desayunen, asistan puntualmente a sus clases, vayan limpios y con sus tareas elaboradas.
El asunto es que este tipejo lerdo de Aurelio Nuño, titular de la SEP, se evidenció al invitar a los alumnos de la Escuela Primaria “Josefa Ortiz de Domínguez”, el 14 de noviembre 2016, a “ler” y lo repitió como 7 veces, hasta que la alumna Andrea López Salazar, a sus escasos 9 años de edad y en tercer grado de primaria, le hizo una seña discreta para que se acercara y con voz bajita le dijo que no se decía “ler” sino leer. Este menso, todavía le acercó el micrófono, lo que multiplicó la vocecita de la menor.
Diciéndole: Gracias Andrea (al leer su nombre en su gafete). Entonces, ¿qué autoridad moral tiene este tipejo que impulsó la “Reforma Educativa” sancionadora de maestros? Sylvia Irene Schmelkes del Valle, Consejera Presidente de la Junta de Gobierno del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación INEE, y los demás consejeros: Margarita Zorrilla Fierro, Teresa Bracho González, Eduardo Backhoff Escudero y Gilberto Guevara Niebla.
Quienes recibieron tal encomienda del Senado de la República desde el 30 de abril de 2013, tienen la obligación de no dejar pasar este bochornoso incidente. De lo contrario estarán descalificados por no cumplir con su responsabilidad. Mínimo deberán hacerle una recomendación tipo Comisión Nacional de Derechos Humanos, para que deje el cargo, para aplicarle la reforma de marras a esa “autoridá” educativa. Obligados a poner el ejemplo.
Y lo peor de esto fue que la fascista inquisidora e ignorante directora de la escuela, la Profra. Juana Zavala Estrada (dicen las crónicas), que castigó a la alumna Andrea López Salazar, suspendiéndola por una semana sin clases, por avergonzar y humillar al Secretario de Educación (en voz de la niña por humillar al Secretario de Educación). De nada sirvieron las voces de su mamá, de su profesor, ni de la mesa directiva de la Asociación de Padres de Familia.
La alumna Andrea López Salazar, salvó a la comunidad escolar, porque nadie más se atrevió a corregir a la máxima autoridad educativa. Deben reconocerla, ponerla como lo que ya es, un digno ejemplo. Y asegurarle su educación hasta el doctorado en lo que decida estudiar.
Gabriel Fernando Santillán Roque
Profesor jubilado
Ensenada, B.C.
Correo: gafersanroque@hotmail.com