Ya son, pero quieren más.
¿Qué tiene la política que transforma a quien la toma como forma de vida? Profesionistas, empresarios, deportistas que han tenido éxito en sus actividades, de pronto les entra la inquietud por la política y ya no quieren dejarla. Llegan de humildes ayudantes, luego a regidores, todavía no concluyen con su mandato y ya aspiran a una modesta diputación local, pero si se puede, venga la federal.
Ellos y ellas se sienten felices, realizados… hasta cierto punto. Porque la política les hizo ver lo poderosos que pueden ser y cumplen la norma: aspirar a más, siempre más. Un paso al frente, un escalón por subir. A veces bajan uno (aceptan ser diputados, cuando ya han sido alcaldes), porque eso seguramente los catapultará a la gubernatura, ahí está el Kiko, dicen muy en corto a los amigos. Y ciertamente a veces “es chicle y pega”, pero no siempre.
¿Se acuerda usted, amable leyente de El Bronco? Admirado por muchos, adorado por más, ejemplo de todo aquel… aquella con aspiraciones políticas. Vino a nuestro estado, por lo menos a Tijuana a dictar conferencias magistrales y fue difícil que los asistentes cerraran la boca. ¡como lo admiraron! “Si él pudo, también yo, decían muchos”. Pero al final, no tuvieron suerte. Bronco solo hay uno. Los demás deben crear su propio perfil y hacer su lucha en forma creativa, no imitando.
Pues resulta que al Bronco Jaime Heliodoro Rodríguez Calderón, que hizo historia (como en su momento Ernesto Ruffo Appel) ganando la gubernatura de Nuevo León por el periodo 2015–2021, lo escuchamos decir que está listo para el 18. Como si lo estuviera haciendo tan bien (dicen sus paisanos). Primero el enfrentamiento de Topo Chico, luego el regaño de la CNDH por insultar a la niñez gordita y estigmatizarla. Con otros etcéteras. Y ahora anda en campaña el chico Ricardo Anaya que aprovechándose de su responsabilidad como presidente del PAN y con el inmoral apoyo de gobernantes, piensa que su capacidad es tanta que lo llevará directamente a Los Pinos. No importa que haya asumido un compromiso, lo bota, lo olvida, no cumple con quienes lo eligieron porque tiene otras aspiraciones: ser presidente de la república a los 39 años.
Nota 1.- Perder con dignidad es algo que no se les da a muchos políticos. Es la primera vez (si hubo otra, no la recordamos) que el PRI, ejemplo del “nunca jamás” sigue haciendo uso de su derecho para agotar todas las instancias. Si el voto no les dio la presidencia de Tijuana, acuden a un golpe de suerte. Lo cierto es que Juan Manuel Gastélum ganó con mayoría de una minoría incumplida. Y eso los perdedores deberían admitirlo. Eso es digno, eso es respetable.
Nota 2.- La frivolidad de algunos medios internacionales, nos da ejemplo del nivel que ocupa el periodismo. Están preocupados, utilizan cientos de líneas ágata para determinar si Bill Clinton, en caso de que gane Hillary, será el “primer caballero” de su país. En serio…
Nota 3.- Fundación Teletón México, A. C. recibió de abril a agosto 28 millones de pesos, no de la cuenta específica del gobierno del estado, sino del presupuesto destinado a los Organismos de la Sociedad Civil, que han visto reducir drásticamente los apoyos a partir de este gobierno en donde “la gente manda”.
Luz Elena Picos es Directora de Red Social de Tijuana. Correo electrónico: redsocialtijuana@hotmail.com www.lagacetaredsocial.com
