El reportero del diario británico The Guardian, José Luis Montenegro, denunció que amenazado de muerte luego de que publicó el pasado 9 de agosto un reportaje, en el cual se denuncia la relación entre un potencial contratista del gobierno mexicano, Ricardo Pierdant, y la primera dama de México, Angélica Rivera Hurtado, con un departamento de su propiedad en Estados Unidos.
Las amenazas, que fueron vertidas a través de la red social Twitter y van desde tuits como “La patrona ya dio la orden” o bajarle” a sus textos, acompañados de fotografías de sujetos con armas de fuego o balas, fueron denunciados por el propio Montenegro a Artículo 19, una organización defensora de los Derechos Humanos y la libertad de expresión.
A mediados de julio, el rotativo británico difundió la versión de que Pierdant, un supuesto “potencial contratista del gobierno federal”, presta un departamento a la pareja presidencial mexicana en Miami, Florida.
Los autores del trabajo, Julio Roa y Montenegro, señalaron que la hermana del empresario señalado en la investigación, Aurora Pierdant, había sido inhabilitada por Petróleos Mexicanos (Pemex) por irregularidades en contratos y que había obtenido recursos de la paraestatal.
No obstante, la abogada encaró a Montenegro a través de su cuenta de Twitter y precisó que el reportero nunca pidió su opinión para hacer el trabajo, además de que no investigó que ella apeló ante el Poder Judicial su inhabilitación y ganó, por lo que sus derechos fueron restituidos en 2013.
Aurora Pierdant aclaró que ella trabajó en Pemex de 2003 a 2014 y que la licitación que le adjudican la obtuvo tras competir con otros dos consultores en materia petroquímica y luego de hacer la oferta más baja.
Al respecto, Montenegro se limitó a contestar en dos tuits, escritos en inglés, en los que hacía alusión a que la política de The Guardian es “corregir errores significativas lo más pronto posible”, lo que el medio no ha hecho.
No conforme con la respuesta del reporte, la abogada adelantó a través de su cuenta de Twitter que emprenderá acciones legales en contra de Montenegro, por daño moral tras acusarla de conflicto de intereses.
La Presidencia de la República ya había acusadp al diario británico de faltar a la verdad en sobre la nota que aludía a la primera dama mexicana. A través de un comunicado firmado por Eduardo Sánchez Hernández, coordinador de Comunicación Social, Presidencia dijo que: “En su encabezado la nota afirma que ‘El hogar de la Primera Dama de México en Florida, es propiedad de un contratista potencial del Gobierno’”.
“Es falso que el departamento referido sea el ‘hogar’ de la señora Rivera en Florida. Ella misma hizo público que en 2005 adquirió una propiedad, distinta a la que refiere la nota, en el mismo edificio”, aunque la nota del The Guardian sí hacía referencia a esa propiedad.
Sánchez Hernández añadió que “En la nota se afirma que el señor Ricardo Pierdant es un contratista ‘potencial’ del Gobierno, sin ofrecer un solo dato, documento, o declaración que lo sustente. Es una especulación a todas luces dolosa.”
El comunicado no desmentía el uso del departamento propiedad de Pierdant ni menciona el pago que la empresa de éste, Grupo Pierdant, hizo del impuesto predial del inmueble propiedad de la primera dama.
El coordinador de Presidencia añadió que “El señor Ricardo Pierdant no ha celebrado contratos con el Gobierno de la República y tampoco participa en algún proceso en curso” y dijo que lamentaba que The Guardian, “oriente a sus reporteros a predecir el futuro, más que a confirmar la veracidad de su información”.