En Trussville, Alabama, una adolescente tuvo que ser socorrida por los bomberos cuando ¡EN ZERIO! una máscara de Barney se le quedó pegada en la cabeza.
A sus 15 años, a Darby Risner se le ocurrió tomar esta máscara del dinosaurio morado que encontró en su iglesia para asustar a sus amigos.
La chica se sentó en una banca y se divirtió moviendo tremendo objeto que se cubría hasta los hombros hasta que se dio cuenta que ya no se la podía zafar.
Entonces sus amigos trataron de liberar a la bromista que ya había entrado en pánico. Al ver que el esfuerzo era inútil, no tuvieron otro remedio que llamar a la mamá de la quinceañera, quien finalmente resolvió el problema en el departamento de bomberos, donde no faltaron las merecidas carcajadas.
Mala comparación
— Mamá, ¿eres como Celia Cruz?
“Claro que no, ¿por qué la pregunta?”.
— Porque tienes mucha AZÚCAAAR.
“¡Mira hijo de la Chilindrina, me estoy muriendo de diabetes y tú sales con tus babosadas!”.
Autor: Un muchacho muy pesado.
Crítico
Un maestro de arte visita la exposición de un joven pintor:
— Así que usted pintó estos cuadros…
“Sí, maestro, así es”.
— Joven, su obra me recuerda a Beethoven.
“¿Beethoven?, ¡Pero si Beethoven no era pintor!”.
— ¡Usted tampoco!
Autor: Un escritor.
A propósito del nuevo sistema de justicia…
Un ladrón está en un juicio; el juez pregunta:
— ¿Está arrepentido de su acción?
“Sí, mucho…”.
— ¿Y por qué no devolvió la pulsera?
“Porque por dentro decía ‘Tuya para siempre’”.
Autor: Un abogadete.
Oficio
Va un paletero en su bicicleta muy tranquilo por una calle. Por otra calle va el joven de la pizzería en su motocicleta a gran velocidad. Muy tranquilo, el paletero sigue su venta. El joven de la pizzería está muy apurado, pues se van a cumplir los 30 minutos y no le van a pagar. Cuando en una esquina se encuentran el paletero y el de la pizzería, chocan. El paletero sale volando, las paletas se riegan y el de la pizzería, muy asustado, comienza a gritar:
“¡Oh Dios mío! Maté al paletero, ¡llamen a una ambulancia, maté al paletero!”.
El de la pizzería le pregunta al paletero, quien estaba tendido en el piso:
— ¡Qué tiene señor, qué tiene!
Moribundo, el paletero responde:
“Maaangoo… Freeesaaa… Piiiñaaa”.
Autor: Un repartidor… de algo.
Diagnóstico
El mecánico al cliente:
“El precio final ha sido un poco más alto que el presupuesto inicial; su batería necesitaba un auto nuevo”.
Autor: Anónimo de una agencia automotriz.
Precavido
Estaba un borrachito en un yonque tratando de prender un carro sin motor ni llantas. En la barda estaba un chamaco riéndose de lo que estaba haciendo el borracho, cuando en eso pasa un policía y le pregunta:
— ¿Por qué te estás riendo?
“Es que ese borracho está tratando de prender ese carro sin motor, y no puede”.
— ¿Y tú por qué estás arriba de la barda?
“¡Por si lo prende!”.
Autor: Un mecánico.
Recomendación
— Mi médico me prohibió que juegue al futbol.
“¿Por qué? ¿Te detectó algún problema de salud?”.
— Ninguno. Pero jugamos en el mismo equipo.
Autor: Un entrenador de futbol.
Aventado
Había un rey que decía: “El que pase por estos peligros tendrá mi casa, mi oro y mi reino”. Todos van al concurso.
Había un lago llenos de cocodrilos y, luego de eso, una manada de tigres y leones.
Nadie se disponía, hasta que uno se lanza y pelea con los cocodrilos, después golpea a los leones.
Todos aplauden, hasta el rey, luego éste dice:
— Toma mi oro, mi reino y mi casa.
El hombre que se lanzó contesta:
“No quiero nada de eso”.
— ¿Entonces qué quieres?, pregunta el rey.
“¡Encontrar al infeliz que me empujó!”.
Autor: Un traidor muy divertido.
Mala educación
Ayer en la iglesia a un imbécil se le ocurrió prender un cigarro en plena misa. Me ofendí tanto, que casi le aviento mi cerveza en la cara.
Autor: Un monaguillo.
Sinceridad femenina
Cuatro mujeres se sinceran:
“Yo soy de cascos tan ligeros que vuelan”.
“Yo soy borrachísima”.
“Yo siempre seduzco a los maridos de mis vecinas”.
Y la cuarta dice:
“Pues ya se fregaron, ¡porque yo soy chismosísima!”.
Autor: La quinta amiga.
Por odioso
— Me voy a comprar algo fundamental.
“¿Qué cosa?”.
— Un gorro, ¡jajaja! ¿Lo entendiste? Funda-mental… ¡jajaja! ¡No te vayas, no tengo amigos!
Autor: Un solitario.
Piropo a medias
— ¡Oye, pareces princesa!
“¿En serio, mi amor?”.
— Sí. Eres idéntica a Fiona.
Autor: Un soltero.