Aquí uno está en medio de la acción, pero no precisamente como testigo en busca de adrenalina, sino más bien como espectadores de un dilema moral dentro del contexto de un ataque militar con drones en Nairobi.
Es de gran apoyo tener en el elenco a Helen Mirren en el rol de Coronel Powell y a Alan Rickman como el General Benson, además de Aaron Paul al frente de una de las naves no tripuladas.
El enemigo son tres yijadistas somalíes listos para hacer atentados. Esto ya lo han comprobado con una red de espionaje y de inteligencia que involucra tecnología de punta y la colaboración de Estados Unidos con la Gran Bretaña, hasta que se complica primero al tener ciudadanos de sus países entre el blanco, y después, cuando se percibe la presencia de una niña en la zona.
Entonces el “thriller” nace justo ahí, en el complicadísimo proceso de toma de decisiones y, sobre todo, de estrategias para evitar ser el responsable de dar la orden de ejecución.
Bravo por el guion de Guy Hibbert, capaz de tejer escenas desde diversas partes del mundo, sin que se sacrifique la continuidad de esta historia que marca el abismo entre los soldados en combate y los políticos que nada saben de la realidad, pero son diestros en el arte de pasarle la estafeta a otro.
Aquí vemos otra vez por qué es Rickman una gran pérdida para el mundo actoral. En esta ocasión brilla en el rol del militar de corazón que enfrenta a estos hombres tan políticamente correctos que no saben qué hacer, mientras que Mirren comprende las implicaciones, pero su perfil sigue concentrado en la misión que debe cumplir.
Vaya batalla interior la que estos personajes padecen y nosotros junto con ellos, en una película tan bien dirigida por Gavin Hood que deja al descubierto el tremendo enredo que es el combate al terrorismo como el eje de una guerra moderna que todo lo redefine. Y esto no es cualquier hazaña. ****
Punto final.- ¿Ya vieron el tráiler de “Fantastic beasts”? Bien por J.K Rowling como guionista. Según esto en noviembre nos llevará de nuevo al mundo de Harry Potter.