Increíble, pero es cierto.
Durante el pasado diciembre, en muchas ocasiones tuvimos oportunidad de utilizar el transporte público. ¡Sorprendente!: las unidades lucían limpias, nada de grafiti, el chofer con uniforme, lucía limpio, dedicado a lo suyo: a manejar. Nada de usar el celular, tampoco de “socializar” con el pasaje y por consecuencia sin palabras altisonantes. No radio, nada de música grupera o “reality show” (recordemos que el programa de la Chula y el Chon, estaba vigente).
Los viajes tranquilos, en tanto alcanzara lugar para no ir parada, pero aún en estos casos, era usual el caballeroso gesto de ceder el lugar. Sorprendente sí y ¡el costo! de $2.00 a $5.50 por largas distancias. Eso fue en diciembre pasado, en la Ciudad de México. Y luego a partir de enero y febrero, la otra cara de los servicios, en la querida Tijuana, ¡un verdadero suplicio! las Calafias, en su pequeñez de espacio, coloca a la gente como sardinas.
Pero también están los Azul y Blanco, unidades aquéllas y éstos totalmente desvencijados, mugrosos, grafiteados, asientos rotos y ni hablar de los choferes, ¡Dios!, los choferes, malhablados, ocupados en sus asuntos vía celular, música horrible, vulgar, velocidad endiablaba en ciudad, bulevares y carreteras. Por verdadera necesidad o masoquismo se les patrocina.
La vulgar campaña de llenar los vidrios de sus unidades para agredir al presidente municipal Jorge Astiazarán, “porque les quita su patrimonio” ¿de choferes? ¿De trabajadores del volante? Porque dueños no son de esas unidades. Y luego los que firmaron sin leer el documento, los regidores. Pues ¿cómo iban a leer el documento que aprobaron? Andan más ocupados en las campañas políticas que en su trabajo.
Tijuana merece un buen transporte público, amigable con la naturaleza y, especialmente con los pasajeros. Ya no es posible seguir usando esas decadentes unidades que inundan las calles, pelándose en cada esquina por el pasaje. Es que son muchas. Habrá que ir buscando otra forma de vida. Y mientras tanto “los que corren peligro de perder su patrimonio” deberán buscar nuevas formas de protestar, no estrangulando a la ciudad, no agrediendo a la ciudadanía. No cometiendo delitos.
Nota 1. La modernización del Transporte, que quede claro, se inicia en el XXI Ayuntamiento de Tijuana. Que ahora algunos candidatos lo agreguen a “su programa y promesas”, no significa que ellos son los artífices de este esfuerzo, que incluso está siendo saboteado desde el propio cabildo.
Nota 2.- Hay quienes dicen que están abrumados con tantos candidatos, que incluso ni siquiera se han podido aprender los que aspiran a diputaciones. Puede resultar sencilla la elección si cada votante al mencionar un nombre o verlo en la boleta, “le dice algo”. La mayoría son desconocidos en el servicio, en el trabajo comunitario y en las conductas solidarias. Simplemente escoja a quien con hechos, ha demostrado o que promete.
Nota 3.- Y por favor, programe en el domingo 5 de junio, ir con toda su familia y convencer a los amigos que deben ir a votar. Su voto es importante.
Luz Elena Picos es Directora de Red Social de Tijuana. Correo electrónico: redsocialtijuana@hotmail.com www.lagacetaredsocial.com
