Agentes operativos y del área de Inteligencia iniciaron la búsqueda de integrantes de un grupo de narcomenudistas que delinquen en la Zona Norte, autores de amenazas a la vida de elementos de la Policía Municipal de Tijuana
La versión en manos de las áreas de inteligencia y operatividad de la Secretaría de Seguridad Pública de Tijuana, es que los delincuentes de la Zona Norte están pidiendo a policías corruptos, datos de los miembros del Grupo de Apoyo de la corporación, para cazarlos.
Según información aportada por dos áreas de la SSPM, datos proporcionados por delincuentes indican que los criminales están ofreciendo 50 dólares a cambio de las direcciones de las casas de otros agentes “hasta por 20 dólares”, refieren algunos de los implicados en el seguimiento del caso.
Fue tras el ataque armado en contra del agente Erick Román Díaz Sandoval, ocurrido la tarde-noche del sábado 16 de abril en la Zona Centro de Tijuana, que salió a relucir la amenaza de un grupo de narcomenudistas a los dos Grupos de Apoyo que hacen operativos contra la venta de droga en la Zona Norte, el área más conflictiva y de mayor circulación de enervantes en Tijuana.
“Hay varios elementos amenazados”, confirmaron desde la Secretaría de Seguridad de Tijuana, “lo extraño”, es que ninguno lo reportó, ni solicitó ser removido a otra adscripción, como marca el protocolo para estos casos.
Ya tienen sospechoso del ataque contra Díaz, se trata, aseguraron, de quienes hicieron las amenazas directas contra algunos uniformados. Los identificaron por apodos y las autoridades los buscan fotografía en mano, pero aún están verificando el grado de implicación de cada uno de ellos en el crimen. Actualmente los sospechosos son: “El Negro y/o El Moreno”, “El Max” y “El Chayo”. Explicaron que son vendedores que delinquen en las zonas identificadas como “Las Tumbas” y “El Callejón”.
El mismo día del atentado contra Díaz, agentes activos detuvieron a dos vendedores de droga que presumiblemente actuaron como “punteros”, encontraron mensajes en sus teléfonos alusivos a esa actividad, pero los liberaron ante la falta de elementos que corroboraran su participación.
Del motivo de la amenaza, la mayoría de los jefes de los diversos grupos en la corporación indican que ambos equipos del Grupo Apoyo, integrados cada uno por cuatro oficiales, están entregando trabajo, “…y mucho”.
El problema, de acuerdo a lo expresado por algunos de los delincuentes detenidos en sus entrevistas, es que uno de los equipos “se está pasando” y están consignado menos droga de la que incautan, “pero esas son las versiones de los criminales, la verdad es que no se ha hecho una investigación”, confió un jefe de la Municipal.
DEFIENDEN A DÍAZ
En cuanto a los veintiocho envoltorios y dos tubos, conteniendo sustancias similares a la marihuana, cocaína, cristal y heroína, así como las diez tarjetas bancarias a nombre de distintas personas, encontradas por el Ministerio Público del Fuero Común en una maletita en el auto que conducía el agente Díaz al ser atacado, algunos oficiales de la SSPM lo defienden.
Hasta ahora, se niegan a hacerlo públicamente, pero a ZETA se han acercado por lo menos tres elementos de la Policía de Tijuana y el planteamiento general ha sido: “Los globitos es lo que encuentras en la chamba, casi es normal, las tarjetas es lo que le quitas a los tarjeteros, si debió turnarla… pero esa cantidad no es para hacer negocio”.
También hicieron llegar versiones de que las amenazas más fuertes y públicas de los vendedores de droga se han dado contra otros oficiales, y los matones que actuaron el 16 de abril pudieron haberse equivocado.
Asimismo, acercaron el oficio TO1/423/2016 de la Policía Municipal de la Zona Centro, en el cual informaron que el día de los hechos, Díaz vestía pantalón operativo y camisa negra, y que el Ministerio Público aseguró, entre otras cosas, una maleta tipo maletero marca Nike, una cangurera roja y una mochila negra sin marca. Destacaron que nunca se mencionó la droga.
Y contrario a lo registrado en el expediente de la Procuraduría General de Justicia del Estado, 619/16/20A/AP, argumentan que Díaz no tuvo una primera entrevista con los agentes ministeriales.
AP/PGR/BC/TIJ-11/1082/PP/2016
En cuanto a la averiguación enviada por la PGJE por incompetencia a la PGR, relacionada con las 30 dosis de droga y 10 tarjetas bancarias que el Ministerio Público del Fuero Común asevera encontraron en el auto del policía, la instancia federal ha validado algunas declaraciones que obraron en el expediente.
Pero como no hay detenido, iniciaron una averiguación previa contra quien resulte responsable, y por su estado de salud, Díaz no ha sido declarado, le preguntarán cómo llegaron esas cosas a su auto y en su momento se podrá defender o negarlo.
Como la cadena de custodia de las drogas en mención y las tarjetas tiene vacíos- las encontraron horas después del peritaje de las trayectorias de las balas en el auto-, consideran que será difícil fincarle responsabilidad por las inconsistencias en el trabajo del fuero común. Pero el expediente continúa en proceso.
SECRETARIO SE NIEGA A HABLAR
ZETA solicitó una entrevista oficial con José Luis López Medina, encargado de la Policía de Tijuana, principal responsable de las condiciones de trabajo de los uniformados, y la respuesta que remitió a través de sus encargados de comunicación fue que precisamente “… por seguridad la Secretaría se abstiene de hacer comentarios de este tema, no se van a dar elementos a los criminales”.
— Pero él es el responsable, ¿no va a respaldar a sus elementos?
“Pues no va a comentar, esa es la respuesta”, concluyó el emisario.
Señalamientos en contra
Un residente de la Zona Centro que se identificó plenamente y pidió anonimato, explicó que fue detenido de manera arbitraria por el oficial Erick Díaz, en octubre de 2015. Aseguró haber sido “paseado” a bordo de la unidad durante cinco horas, hasta que lo presentaron en la delegación de la misma colonia, donde el agente declaró al juez calificador haberle encontrado residuos de marihuana.
El denunciante afirma que durante este proceso, pudo percatarse de cómo Díaz detenía a narcomenudistas, les quitaba su mercancía -la cual guardaba- y los dejaba ir, cobrándoles un soborno.
Contra este oficial de policía existe una recomendación para iniciar un Procedimiento para la Imposición de Correctivos Disciplinarios, numerada 447/13, del 22 de octubre de 2014, hecha por la que entonces era denominada Procuraduría de los Derechos Humanos y Protección Ciudadana de Baja California, por el uso de lenguaje soez, prepotencia y arbitrariedad mostrada al momento de practicar una detención.
