Según delaciones de Melissa Margarita
Calderón Ojeda “La China”, agentes de
las policías Municipal, Ministerial y
Estatal Preventiva en la SEIDO, son los
principales responsables de la ola de
violencia, al brindar protección a
grupos criminales
Investigaciones ZETA.-En la guerra entre células criminales del Cártel de Sinaloa en Baja California Sur, según la ex jefa de sicarios de las conocidas como “Fuerzas Especiales de Los Dámaso”, Melissa Margarita Calderón Ojeda “La China” o “La Mely”, se encuentran policías, comandantes y mandos de las corporaciones Municipal, Ministerial del Estado y Policía Estatal Preventiva.
Los que se supone deberían salvaguardar la seguridad de los sudcalifornianos, “reciben semanalmente dinero de las organizaciones delictivas, de un bando y de otro, y son los principales responsables de la venta y distribución de droga, levantones y ejecuciones”.
Según la sicaria, el pago de cuotas de protección es el siguiente:
* 30 mil pesos semanales a cada mando, desde directores operativos hasta directores generales.
* 10 mil pesos semanales a comandantes de grupo o de sector.
* Entre 3 mil y 5 mil pesos por semana a policías municipales, ministeriales y estatales.
Lo anterior se encuentra plasmado en la averiguación previa PGR/SEIDO/UEIDCS/612/2015/, después de que Calderón Ojeda “La China” fuera extraída del Centro de Reinserción Social de La Paz, y enviada el 24 de marzo al Centro de Arraigo de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de la Delincuencia Organizada, tras haber sido requerida por un fiscal de la Unidad Especializada en Delitos contra la Salud.
Según “La China”, la lista de policías y protectores de “Los Dámaso” es muy amplia, e identificó a algunos como “Enrique”, “Jesús”, “Francisco”, “Alfredo”, “Ernesto”, “Jorge” y “Fidel”, de los cuales desconoce los apellidos, pero ofreció sus rasgos físicos, señas particulares, modos de hablar y hasta algunos domicilios particulares.
Sin embargo, cuando se le solicitó ser más explícita con los nombres de sus cómplices, no olvidó la lista de jefes policiacos con los que “mantuve relaciones sentimentales y sexuales, los cuales son de distintas corporaciones, y a quienes alineé y los puse en contacto con mis jefes para que trabajaran con nosotros”.
En la lista de la jefa criminal de las “Fuerzas Especiales de Los Dámaso”, aparecen:
* Édgar García López, ex comandante de Robos en el Sector Tres y actual comandante en San José del Cabo.
* Monserrat Calderón Hinojosa, ex escolta del ex secretario general de Gobierno, Luis Armando Díaz y actual agente de la Policía Estatal Preventiva.
* Bibiano Rigoberto Burgoing García, ex comandante de Homicidios y actual encargado de despacho en la Dirección de la Policía Ministerial del Estado.
“En estos casos fueron quienes más nos ayudaron, ya que nos dejaban vender drogas y cometer homicidios de los contras en sus zonas de influencia, e igualmente nos protegían en nuestras rutas de escape y no nos molestaba nadie”, detalló “La China”.
En el caso particular del comandante García López, “cuando lo cambiaron de La Paz a San José del Cabo, porque había sospechas de que estaba vinculado con nosotros, nos sirvió mucho, porque por aquel lado empezamos a meter las armas y los sicarios que venían a matar de Sinaloa; en una ocasión me dijo que no me preocupara, que estaba bien parado dentro de la Policía Ministerial del Estado”.
De igual forma, Melissa echó de cabeza a Monserrat Calderón Hinojosa, quien “nos protegía desde el gobierno de Narciso Agúndez, cuando era escolta y guardaespaldas del ex secretario general de Luis Armando Díaz”, y remató con Bibiano Rigoberto Burgoing García: “El comandante Bibiano era gente nuestra, era el vínculo directo con Samgar (Salvador) Gómez (Reyes), quienes junto con los comandantes José Luis Ramírez y Jesús Javier Carrillo, operaban para nosotros, atorando contrarios y aventándoles broncas”.
EL ESTALLIDO
Cuando la jefa criminal fue interrogada sobre cómo y de qué manera había ingresado a las filas de las “Fuerzas Especiales de Los Dámaso”, Melissa Margarita expuso: “Yo trabajaba como sexoservidora y me tocó conocer a una persona de nombre Rolando González Moreno alias ‘El Compadrón’, el cual después supe, era el jefe de la plaza del narcomenudeo en la mitad de la ciudad de La Paz, particularmente la Zona Norte, tomando como línea divisoria el bulevar Luis Donaldo Colosio, me invitó a trabajar y me estuve con él algunos meses, hasta que capturaron a (Joaquín) ‘El Chapo’ Guzmán”.
La criminal reveló que la guerra estalló “cuando el ‘Licenciado Dámaso’ (López Serrano) mandó su gente para la ciudad a pedirle que entregara la plaza, ya que se la iban a recoger, y obviamente no estuvo de acuerdo y terminó matando a toda la gente del ‘Licenciado Dámaso’, entre ellos (Esteban Espinoza Velázquez) ‘El Pantera’. Después de este evento, más o menos dos o tres meses después, me levantó la gente que decían llamarse de las ‘Fuerzas Especiales de Los Dámaso’, quienes venían a matarme, porque me dijeron que era gente de los contras, pero yo les dije que si me perdonaban la vida les iba a entregar la cabeza del ‘Compadrón’, así como unas armas que tenía escondidas en una casa que yo le había conseguido, por lo cual aceptaron”.
La matona entregó el armamento y dio la dirección del ex jefe de la plaza del narcomenudeo, y posteriormente “empecé a trabajar con ellos, ya que les había caído bien, los cuales me dijeron que en adelante sería una célula de Los Dámaso, y el principal objetivo era quitarle la plaza a ‘El Compadrón’ y su gente, ya que había volteado bandera y estaban alineados con (Ismael) ‘El Mayo’ Zambada y (Fausto Isidro Meza Flores) ‘El Chapo Isidro’, y se trataba de matar a toda la gente, porque ellos también iba a querer matarlos, y los estaban matando”.
De igual manera, la ex jefa criminal develó la red criminal de Los Dámaso que -según ella-la remplazó, a partir del 20 de septiembre de 2015, después de que fue detenida y sujeta a proceso penal en el CERESO e La Paz:
* Un sujeto identificado como “Juan”, con el apodo de “El Amigo”, quien ordena los crímenes desde Sinaloa y el contacto directo con el capo Dámaso López Serrano “El Mini Lic”, quien fue descrito de complexión regular y tez morena.
* “Paúl”, de complexión robusta, tez blanca, bigote y “güilo” del pie izquierdo, quien quedó como encargado de proveer armas, drogas y casas de seguridad a todos los criminales.
* “José”, quien se encarga de entregar vehículos robados en Tijuana y Culiacán, a fin de ser utilizados en actividades criminales.
* Fernanda Judith Bravo Castro, Viridiana Quintero Casillas y Dunia Matilde Alameda Fausto, responsables de ubicar contras y ponerlos a Los Dámaso.
LOS ÚLTIMOS CRÍMENES
Las delaciones de Melissa Margarita Calderón Ojeda “La China” o “La Mely” terminaron por confirmar los vínculos criminales entre delincuentes y policías, cuando el pasado 2 de abril, regresó la violencia.
Esta vez, en el municipio de Comondú y La Paz, y después de cuatro ejecutados, en tres diferentes ataques armados, sospechosamente no hubo un solo detenido.
Con un encargado de despacho señalado, la Policía Ministerial del Estado casualmente no tiene pistas de los asesinos, y los expedientes de crímenes se siguen abultando cada semana en la oficina del procurador general de Justicia del Estado, Palemón Alamilla Villeda.
Hasta el cierre de edición, éstos han sido los últimos ataques armados:
* A las 7:30 am del sábado 2 de abril, apreció un hombre ejecutado muy cerca del campo de tiro, sobre el camino a Palma Seca en la carretera de Ciudad Constitución a Ciudad Insurgentes. La víctima estaba a escasos metros de un perro de raza Pitbull amarrado de un poste, el cual tenía un rozón de bala en la cabeza.
* A las 10:58 pm del domingo 3 de abril, otro hombre fue atacado dentro de su domicilio en el poblado de Las Pocitas, en el Kilómetro 111 de la carretera de La Paz a Ciudad Constitución. Recibió dos disparos en el tórax y uno en el hombro, brazo y pierna izquierda.
* El martes 5 de abril se registró el último ataque armado de la semana, el cual sobrevino cuando los tripulantes de una camioneta Honda Element de color gris, placas de circulación 538PNC3, fueron alcanzados por un comando armado en el Kilómetro 18 de la carretera de La Paz a Ciudad Constitución, y atacados por sicarios a bordo de un automóvil Nissan Sentra de color negro, con placas americanas.
Dentro de la camioneta quedaron muertos Jesús Alberto Higuera Camargo y Lucina Ávila González, resultando heridas Rosa María Duarte Villalobos, de 61 años, y Angelina Camargo Navarro, de 55, ambas originarias de Ciudad Insurgentes; su estado de salud se reportaba como grave.
En la escena del crimen, peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado levantaron alrededor de 30 cartuchos percutidos calibre 7.62 x 31 milímetros de rifles de asalto “AK-47”.
De acuerdo con familiares de las sobrevivientes, los occisos eran conocidos integrantes de una comunidad de iglesia evangélica.
No obstante, y según agentes de investigación en el caso, los cuatro ataques armados estarían ligados a una pugna entre células criminales del Cártel de Sinaloa y de los Arellano Félix por el control de la plaza de Ciudad Constitución.
En el último ataque el objetivo era la madre de la principal célula del Cártel Arellano Félix en el Norte del Estado, Julio Cordero Duarte “El Julión”, cuyo atentado fue un mensaje del grupo rival.
Según un integrante del Grupo de Coordinación de Seguridad Pública del Estado consultado por ZETA, en Comondú, “El Julión”, era la cabeza más visible de los Arellano Félix en el Norte de Baja California Sur, después de la ejecución de Martín Anaya Gorozave “El Talibán”, ocurrida el primero de febrero en el poblado de El Vizcaíno.
Informes de inteligencia de autoridades federales y militares reportan una reagrupación del CAF en la entidad, quienes pretendieron sin éxito tomar el control criminal de El Vizcaíno y Guerrero Negro a través de “El Talibán”, y ahora el de Ciudad Constitución por medio de “El Julión”.
Con base en el último mapa delictivo de autoridades federales y militares, el control de los grupos criminales de Guerrero Negro hasta Ciudad Constitución, está estructurado de la siguiente manera:
* Los hermanos Damián y Eduardo Villavicencio Arce controlan Guerrero Negro y Vizcaíno por parte del grupo Gente Nueva del Cártel de Sinaloa.
* Sin una cabeza visible, el CAF controla San Ignacio, Santa Rosalía y Mulegé.
* Luis Antonio Montoya Beltrán “Don Carlos” o “El Montoya”, cabeza visible de Los Mayitos, controlan Loreto y la zona rural y pesquera de Comondú.
* Sin una cabeza visible, Los Dámaso controlan Ciudad Constitución.
Finalmente, de acuerdo con uno de los integrante del Grupo de Coordinación de Seguridad Pública, el tema que preocupa ahora es el mecanismo de trabajo del procurador General de Justicia del Estado, Palemón Villeda Alamilla, quien prácticamente no ha podido conformar un equipo serio, profesional y confiable, sino por el contrario: se ha rodeado de funcionarios señalados de vínculos con la delincuencia organizada, lo que obviamente está abonando a la ola de violencia. Tal es el caso de:
* Samgar Salvador Gómez Reyes, quien nuevamente ocupa el cargo de la Dirección Antisecuestros, a pesar de que recientemente fue cesado por el gobernador Carlos Mendoza Davis como subprocurador de Investigaciones Especiales.
* Bibiano Rigoberto Burgoing García, encargado de despacho de la Policía Ministerial del Estado, quien tiene como su brazo derecho a Mateo Alejandro Romero Amador y Felipe Ojeda Cota, a pesar de estar sujetos a proceso penal.
* José Luis Ramírez Castro y Jesús Javier Carrillo Cosío, comandantes del Centro de Operaciones Estratégicas en Guerrero Negro y La Paz.