El gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, aseguró que para “fortalecer la respuesta frente a la inseguridad” en el estado, los medios locales deberían “entrar a una etapa donde hablemos menos todos los días” para incentivar el turismo y el empleo en la entidad.
De acuerdo con el mandatario estatal, los medios de comunicación deben hablar bien de Acapulco y hacer un “convenio de silencio” como el que supuestamente realizó la prensa en otro destino importante de la entidad: Zihuatanejo.
“Que nos ayuden a que la gente hable menos de las desafortunadas circunstancias que vive Guerrero. Me llamó la atención lo que el otro día dijo alguien en Zihuatanejo: que ellos estaban muy conscientes de lo que vivían, pero que a ellos les interesaba que hubiera turismo y hubiera empleo”, reflexionó Astudillo durante una rueda de prensa.
“Que por eso cada día en Zihuatanejo todos hacían un convenio de silencio a efecto de que estuviera el turismo repleto al 100 por ciento. Yo creo que los medios juegan un papel importantísimo, especialmente los locales”, señaló el gobernador.
“Gracias a todos los que se dedican a hacerle promoción mala a Acapulco. Gracias”, ironizó después el mandatario estatal.
De acuerdo con Astudillo, lo que debe hacerse es fortalecer la respuesta frente a la inseguridad y “entrar a una etapa donde hablemos menos todos los días, más de lo que sufre el estado, sin dejar de decir lo que pasa en Guerrero”.
Astudillo insistió que los asesinatos ocurridos durante las vacaciones en Acapulco, y aun en la Costera, “no fue un asunto ni contra turistas ni contra ciudadanos que estuvieran en su oficina o haciendo algo en especial, todo fue relacionado fundamentalmente con asuntos de droga y con asuntos también de cobro de piso”.
El gobernador guerrerense también hizo mención a la propuesta de diálogo con los cárteles de la droga lanzada por el obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, y subrayó que no está de acuerdo en dar paso libre a las drogas a Estados Unidos por territorio mexicano, como otra de las maneras de terminar con la violencia del crimen organizado en el estado.
Sobre los comerciantes de Acapulco que cerraron sus negocios por el cobro de derecho de piso, añadió: “Hay que tratar de colaborar para que la gente siga adelante, porque lo que hay que cuidar también es el empleo. Entonces estaré al pendiente de cualquier circunstancia”.
Finalmente destacó que en Semana Santa hubo una buena temporada vacacional en Acapulco porque muchos visitaron Guerrero, pero omitió decir que durante dicho periodo se contabilizaron 62 asesinatos en el destino turístico, presuntamente relacionados con la disputa del crimen organizado, a pesar que 4 mil 594 marinos, soldados y policías fueron desplegados para cuidar a los visitantes.
