LIBRÓ 20 PROCESOS
A punto de cumplir su condena en los Estados Unidos de América, el delincuente mexicano Jesús Héctor Palma Salazar, “El Güero Palma”, de 58 años de edad, podría regresar al país sin problemas legales ni órdenes de captura pendientes en su contra.
El Buró de Prisiones de Estados Unidos (BOP) señala en su sitio de internet que el sinaloense, originario de Mocorito, podría recuperar su libertad 11 de junio próximo.
El capo, quien fuera líder del Cártel de Sinaloa junto con Joaquín “El Chapo” Guzmán en la década de los noventa, se encuentra preso en la cárcel de máxima seguridad Adx Florence, en Colorado.
Palma Salazar es uno de muchos criminales que son entregados a la justicia de los Estados Unidos y logran pactar para no verse condenados a largas penas o cadena perpetua. Aunque en el caso del “Güero” el acuerdo no fue económico, pues el hombre se declaró en quiebra a los días de ser extraditado en 2007, se presume que reveló información sobre el narcotráfico en México.
“El Güero Palma”, señalado como uno de los principales narcotraficantes de México, no cuenta con ninguna sentencia firme por delitos contra la salud, pues aun cuando fue condenado en diversas causas penales, en segunda instancia o con la protección de amparos, revirtió los fallos. Tampoco tiene condena alguna por el delito de homicidio. De todo crimen imputado fue absuelto.
El hombre que fue detenido en junio de 1995, en Nayarit, cuando cayó la aeronave en la que se dirigía a Guadalajara, libró con éxito 20 procesos y solo recibió sentencia condenatoria en otros tres, el último de ellos por los hechos colaterales a la fuga de su compadre Joaquín Guzmán el 19 de enero de 2001.
Jesús Héctor Palma pudo haber salido del penal de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco, en junio de 2002, al cumplir las dos penas con que contaba en esa fecha, pero -para retenerlo- las autoridades federales le fincaron una nueva causa criminal bajo el argumento de dirigía actividades de narcotráfico desde dicho reclusorio.
En 2004 “El Güero Palma” fue exonerado de la imputación, pero para entonces ya le habían dictado y cumplimentado la orden de detención con fines de extradición internacional, procedimiento contra el que luchó jurídicamente los siguientes tres años, hasta que fue remitido a la unión americana donde se declaró culpable y fue condenado a 16 años de prisión por tráfico de hasta 50 kilos de cocaína.
Autoridades judiciales recomendaron al sistema penitenciario de Estados Unidos que se tomen en cuenta los cinco años que Palma permaneció preso en espera de ser extraditado, y aunque las cuentas no parecen cuadrar, las versiones sobre su pronta liberación crecen.
Hasta el momento no se conoce de pena o de orden de captura por cumplir contra el capo, por lo que de ser liberado no regresaría a la cárcel, a menos que el gobierno mexicano tenga alguna sorpresa para Palma y sus abogados.