De acuerdo con el Índice de Paz de México (IPM), realizado año con año por The Institute for Economic & Peace, y que mide el nivel de paz en todos los 32 estados de acuerdo a siete indicadores principales, Baja California es la cuarta entidad menos pacífica de la República Mexicana, con una calificación de 3.057, situándose en el lugar 29 de 32, tan sólo detrás de Guerrero, Sinaloa y Morelos.
El Índice de Paz México provee un análisis detallado de los niveles de paz en el país en los últimos 13 años, incluyendo una medición de la paz en los 32 estados del país. Además, cuenta con un análisis del fenómeno de las desapariciones, del impacto económico de la violencia, y propuestas sobre cómo mejorar la paz.
Los cinco estados más pacíficos de acuerdo al IPM son: Hidalgo, Yucatán, Veracruz, Tlaxcala y San Luis Potosí. Mientras que las entidades menos pacíficas son: Guerrero (que por dos años consecutivos ha ocupado el primer lugar de los más violentos), Sinaloa, Morelos, Baja California y Baja California Sur.
De acuerdo con la nueva investigación del Instituto para la Economía y la Paz, las mejoras en la paz se estancaron durante los últimos cinco años. Además, en el último año, la paz en México tuvo el menor avance en su nivel de paz desde 2011, con 0.3 por ciento.
El IPM también destaca dentro de sus principales hallazgos que desde el 2011, hubo una disminución de cerca del 30 por ciento en las tasas de delitos con violencia, homicidio y crímenes de la delincuencia organizada.
El Instituto también indica que 25 de los 32 estados son más pacíficos hoy que en 2011, lo cual indica que alrededor de 85 por ciento de los mexicanos viven en estados más pacíficos. Además, señala, durante el último año, la tasa de delitos con violencia y la de crímenes de la delincuencia organizada disminuyeron 8 y 10 por ciento respectivamente.
Sin embargo, dice el Índice de Paz México, la tasa de homicidios se deterioró por primera vez en cuatro años, con un incremento de 6.3 por ciento entre 2014 y 2015. Así, el IPM concluye que, en 2015, el impacto económico de la violencia fue de 2.12 billones de pesos, equivalente al 13 por ciento del PIB. Esto corresponde a 17 mil 525 pesos por persona, cantidad más o menos igual a dos meses de salario de un trabajador mexicano promedio, dice el Instituto.
En cuanto a las entidades, los cinco estados con mayores avances en sus niveles de paz en los últimos cinco años fueron Nayarit, Durango, Nuevo León, Chihuahua y Baja California. El Instituto destaca que, en 2011, dichas entidades se encontraban entre los siete estados menos pacíficos.
Un aspecto que destaca el estudio es la tendencia hacia una mayor impunidad en homicidios, que se deterioró drásticamente a partir de 2007. En ese año había cuatro condenas por cada cinco casos de homicidio, pero hacia 2013 sólo había una condena por cada cinco casos.
El IPM también muestra una discrepancia entre las víctimas de homicidio registradas en las actas de defunción y las registradas por la policía, ya que se estima que, en 11 estados, 20 por ciento de los homicidios no se investigan.
“El país tiene la oportunidad de alcanzar mejores niveles de paz, sin embargo, se requiere enfrentar dos problemas fundamentales: la administración de la justicia y la corrupción. Mejoras en ambos, temas traerán grandes beneficios ya que, en los estados menos pacíficos, se percibe mayor corrupción,” señaló Patricia de Obeso, Coordinadora del IEP en México.
Pero no todo es negativo, ya que The Institute for Economic & Peace ve “un gran potencial en nuestro país para mejorar la paz”.
“En comparación con otros países con niveles similares de violencia, México tiene el segundo mayor excedente de Paz Positiva o los factores que fortalecen a las sociedades pacíficas, en el mundo. Esto se refleja en su buen desempeño relativo en los factores de entorno empresarial sólido, distribución equitativa de recursos y buenas relaciones con los vecinos. Inversiones en la implementación efectiva de la reforma al sistema de justicia, la confiabilidad de los datos oficiales y en el combate a la corrupción, representarían grandes beneficios económicos y sociales para el país.”, dice la conclusión del estudio IPM.
El estudio se realizó con el apoyo técnico de un panel de expertos que representan a diversas instituciones como el Centro de Investigación y Docencia Económicas, A.C. (CIDE), el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), México Evalúa, Causa en Común, la Universidad de Stanford, el Observatorio Nacional Ciudadano y Jurimetría.
El Instituto se presenta a sí mismo como “un centro de investigación independiente, apartidista, sin fines de lucro, dedicado a promover un mejor entendimiento de los factores sociales y económicos que desarrollan una sociedad más pacífica”.
La actual entrega es la tercera edición del Índice de Paz México, después de que la primera fue publicada en 2013. La investigación presentada en este informe “brinda evidencias y datos para generar un debate sobre el mejor diseño de políticas públicas para reducir la violencia en México”, señala el IPM.