Con cheques de 25 pesos o sin fondos, el gobierno de Baja California inició el primer pago a maestros interinos de nivel básico, a quienes se les adeuda el sueldo desde agosto de 2015, situación considerada por los padres de familia y docentes como “una burla”, lo que derivó en nuevas protestas.
En las instalaciones del Sistema Educativo Estatal –SEE– de Tijuana, el lunes 29 de febrero los inconformes realizaron un plantón de protesta en la que participaron docentes, alumnos y padres de familia de 36 instituciones educativas, actualmente en paro de labores. Nuevamente exigieron al gobierno del estado cumplir con su obligación para que las clases se reanuden.
La participación de los padres fue criticada esta semana por el secretario de Educación, Mario Herrera, quien señaló, “a los padres de familia no les debemos nada, no tienen ningún derecho legal de bloquear el acceso –a las escuelas–, los más afectados son sus propios hijos”. Precisó que el paro mantiene a un promedio de 10 mil alumnos sin clases.
Por su parte, el titular de la delegación 15 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Juan Guillermo Aguilar, dijo que los maestros no retornarán a las aulas, hasta que se cumpla con el pago total de lo adeudado, y no con cheques fallidos o de cantidades nimias.
Como el caso, expuso, de la docente Ana Karen Tovar Olivares, quien recibió como pago a sus servicios prestados como docente interina de agosto de 2015 a enero de 2016, el monto de 26.14 pesos, del cual todavía le fue descontado 1.6 pesos por concepto de “servicios médicos”.
De acuerdo al argumento de las autoridades del Sistema Educativo Estatal, la emisión de esos cheques se derivó de “problemas administrativos dela Secretaría de Administración y Finanzas del Estado”, a cargo de Antonio Valladolid, dependencia que liberó cheques sin fondos y por cantidades mínimas de 25 y 50 pesos, como parte de la nómina extraordinaria lanzada el viernes 26 de febrero.
De ello, Adrián Flores Ledesma, delegado del SEE en Tijuana, dijo a ZETA carecer de un registro de estos casos que le fueron expuestos por los manifestantes, pero sostuvo que ya realizó una solicitud de información a la Secretaría de Finanzas para “buscar estrategias” de corrección.
Respecto al caso de Tovar Olivares, el Director de Planeación del SEE en Baja California, Francisco Castro Benítez, se limitó a decir que los 26 pesos que recibió son producto de un bono adicional del 1 por ciento al pago de los 2 mil 600 pesos que obtuvo por concepto de ejercicio educativo durante los primeros 6 días de febrero, anteriormente se le habían depositado 10 mil por el periodo comprendido entre el 7 y el 31 de enero; sin embargo, según la propia profesora, la deuda databa de agosto pasado.
No obstante, consideró como el caso de Tovar Olivares, “sí puede haber más casos” y exhortó a los profesores a acercarse al SEE a pedir que se revisen sus pagos de manera particular y con los documentos que así lo prueben, porque de lo contrario, las entidades educativas no cuentan con las herramientas suficientes para solventar esas anomalías, mismas que calificó “son algo normal”, pero que, como autoridad están, “en la mejor disposición” de corregir.
De los cheques fallidos anotó que ni maestros, ni Bancomer –institución bancaria a donde llegaron los depósitos– formalmente han presentado una queja formal por el “rebote” de algún cheque.
Solo en Tijuana, falta la retribución de más de 700 profesionales de la educación, de los cuales “ya se les pagó” a 106, y para el 18 de marzo se habrá cumplido el compromiso con 175 trabajadores del aula.