A pesar del incremento en los índices de violencia en el estado de Guerrero, que las autoridades atribuyen a la disputa del territorio por parte de las organizaciones criminales con presencia en la entidad, la ocupación hotelera en los principales destinos turísticos se mantuvo por encima del 90 por ciento.
“El problema de Guerrero, por supuesto, se llama violencia, originado por una competencia de bandas delincuenciales que disputan el territorio, pues fundamentalmente para vender cosas ilícitas” declaró el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores.
Del viernes 18 al viernes 25 de marzo se presentaron en Acapulco 36 homicidios, cifra que según el fiscal estatal, Xavier Olea Peláez, se habría disparado por la presencia de turistas, lo que estimula la venta de droga.
El problema de la violencia en Guerrero se remonta algunos meses atrás, cuando el crimen organizado comenzó a extorsionar a profesionistas y comerciantes, cuotas que seguramente aumentarán en estos días por la gran cantidad de derrama económica que se presentó en el puerto, de más de 2 mil millones de pesos, estimó la Secretaría de Turismo estatal.
Olea aseguró que los homicidios no se han presentado en las zonas tradicionales del turismo y que el promedio diario de este delito se ha disminuido al que existía cuando comenzó la actual administración.