El 6 de febrero el Grupo de Coordinación de Seguridad de Baja California Sur inició la búsqueda del jefe de la plaza del narcomenudeo en Los Cabos, José Guadalupe Acosta López. En el primer operativo fueron detenidos 4 criminales en San José del Cabo
Los Cabos, Baja California Sur.- Después de la captura y la sospechosa liberación de los hermanos Belén y Edeben López Soto, sobrinos del jefe de la plaza del narcomenudeo en Los Cabos, el Grupo de Coordinación de Seguridad Pública de Baja California Sur inició un operativo de búsqueda y persecución para capturar al jefe de la plaza del narcomenudeo en Los Cabos, José Guadalupe Acosta López “El Javier”.
Desde la primera semana de febrero, las unidades de inteligencia de los tres niveles de gobierno ubican a los principales cabecillas de esta organización criminal y las casas de seguridad en San José del Cabo y Cabo San Lucas, en virtud de la presunta amenaza que representa este grupo bélico del capo Dámaso López Serrano “El Mini Lic”, quien –según un integrante de este grupo interinstitucional– podría ser el principal detonante de una nueva guerra entre células del Cártel de Sinaloa en La Paz y Los Cabos.
En el primer operativo realizado el 6 de febrero, el Centro de Operaciones Estratégicas integrados por la Procuraduría General de la República (PGR) y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), capturó a los siguientes criminales:
1.- Álvaro García Cota “El Güero”, de 21 años, originario de San José del Cabo.
2.- Jonathan Arana Hernández “El Árabe”, de 22 años, originario de La Paz.
3.- Cristian Rubén Márquez Bañaga “El Cris”, de 24 años, originario de San José del Cabo.
4.- Edgar Edwin Sánchez Mata “El Paisa”, de 24 años, originario de Badiraguato, Sinaloa.
Los cuatro detenidos admitieron formar parte de la estructura criminal de “El Javier”, y expusieron que desde hace tiempo trabajan en la venta y distribución de drogas en las colonias Santa Rosa, Vista Hermosa, El Zacatal, Guaymitas y Pablo L. Martínez en San José del Cabo.
Los delincuentes dijeron no conocer personalmente a “El Javier”, y solo sabía de él por su apodo, el cual, había huido de Los Cabos y dirigía la organización criminal, desde Badiraguato.
No obstante, tras la negativa, los oficiales del grupo táctico insistieron en obtener datos del jefe criminal, y finalmente lograron saber la media filiación de “El Javier”:
1.- Bajo de estatura, de aproximadamente entre 1.60 y 1.70 metros.
2.- Complexión delgada y cuerpo ligeramente marcado como de deportista.
3.- Cabello rapo, ojos chicos, nariz media larga y mentón delgado.
Cuando los captores solicitaron el nombre de los lugartenientes del jefe de la plaza, primero dijeron no saber nada, y después cayeron en contradicciones, hasta terminar por aceptar que “estaban al servicio de los sobrinos y hermanos” del jefe criminal. Incluso, ofrecieron nombres, direcciones y vehículos en donde se desplazaban y datos que –según un miembro del Grupo de Coordinación– “actualmente están siendo procesados e integrados a un expediente de la estructura criminal del delincuente”.
La persecución
En el inicio del operativo, los agentes de la PGR y de la PGJE, ingresaron al territorio del criminal y de inmediato ubicaron al narcomenudista Edgar Edwin Sánchez Mata, cuando alrededor de las 3 de la tarde del pasado 6 de febrero, circulaba sobre el boulevard Forjadores y Avenida Tecnológico en la colonia Pablo L. Martínez en San José del Cabo.
Los agentes tenían información de que un hermano de “El Javier” se desplazaba en un automóvil de color blanco, línea Spark, marca Chevrolet y modelo 2016, por eso al tenerlo a la vista, solicitaron detenerse.
El conductor de inmediato inició la huida sobre el boulevard Forjadores, y girando posteriormente a la derecha sobre el boulevard Don Guillermo, por lo que inició la persecución por varias calles, pasando cruces y avenidas a alta velocidad hasta que el fugitivo perdió el control del vehículo –a la altura del boulevard Los Agaves– chocando con el camellón, el cual estuvo a punto de voltearse, quedando en sentido contrario.
El delincuente –y tras dañarse la unidad– se bajó corriendo, aventando a escasos metros del vehículo una bolsa de color negro, por lo que fue alcanzado y sometido.
Ya en la revisión de la bolsa arrojada por el criminal, los agentes encontraron lo siguiente:
1.- 14 bolsas de cocaína, conteniendo 42 dosis.
2.- 11 grapas de cocaína base, conteniendo 56 dosis.
3.- 8 grapas de cristal, conteniendo 40 dosis.
Asimismo, hicieron una revisión dentro del vehículo chocado, y en el asiento del copiloto encontraron una bolsa de color beige con la leyenda “Oxxo”, conteniendo en su interior 24 bolsas de mariguana, y alrededor de 960 dosis.
Cuando los oficiales de la PGR y PGJE, cuestionaron su nombre, el delincuente se mostró evasivo, y cuando hicieron un rápido comparativo fisonómico –con un set fotográfico que portaban– con algunos de los hermanos de “El Javier”, descartando que se tratara de alguno de ellos.
Fue entonces que lo comenzaron interrogar sobre el origen de la droga, y Edgar Edwin Sánchez Mata “El Paisa”, y sin necesidad de presionarlo confesó que “la droga era de El Javier”, y el carro se lo había prestado uno de los hermanos, a fin de que saliera a vender y distribuir droga.
Los oficiales solicitaron mayores datos de los cabecillas de “Los Javieres”, y al ver las fotografías de los familiares, contestó: “Son todos los que ustedes traen”.
En la lista aparecen:
1.- Jesús Octavio Acosta López “El Tavo”.
2.- Martín Acosta López “El Martincillo”.
3.- Julián Acosta López “El Mala Cara”.
El narcomenudista reconoció que “los hermanos de El Javier son los que actualmente están dirigiendo la organización delictiva, porque él se fue y dirige todo desde Sinaloa”, y los cuales –reveló– tienen conformada la estructura criminal de la siguiente manera.
1.- Belén y Edeben López Soto, sobrinos de “El Javier” a cargo de la distribución de droga en San José del Cabo.
2.- Oswaldo Pastrana Zacarías “El Oso”, encargado de la plaza en Cabo San Lucas, y quien tiene como sus principales operadores a Álvaro Burgos Sauceda “El Cheque” y Manuel Burgos Sauceda “El Chombi”, así como a “El Torito Medina”.
3.- Raúl Castillo de la Rosa “El Cochi”, responsable en La Paz.
Las capturas
Independientemente de la detención del narcomenudista Edgar Edwin Sánchez Mata “El Paisa”, y quien –según su dicho– “es una de las gentes del circulo de confianza de Los Javieres”, los agentes de la PGR y de la PGJE, más tarde lograron detener en otro operativo a Álvaro García Cota “El Güero” y Jonathan Arana Hernández “El Árabe”, y quienes fueron interceptados cuando circulaban sobre la calle de Avenida La Paz en la colonia Santa Rosa de San José del Cabo.
Los agentes tuvieron a la vista a dos sujetos que iban a bordo de una motocicleta de color roja, marca Italika, por lo que les marcaron el alto, no obstante, intentaron huir, siendo alcanzados 10 metros más adelante sobre la Avenida La Paz entre Pagueros y Cañada.
Cuando la motocicleta paró, el tripulante de la parte trasera, vestido con una sudadera azul y pantalón de mezclilla de color negro, de inmediato se bajo y corrió, iniciándose una persecución pedestre que terminó 30 metros más adelante.
El sujeto fue sometido y revisado, y el cual traía una bolsa de plástico en la bolsa derecha de su pantalón, y en su interior 10 grapas de cristal.
Por otro lado, y tras ser revisado, el conductor de la moto traía consigo 15 envoltorios de cristal.
Los dos fueron detenidos y remitidos al Centro de Operaciones Estratégicas.
Durante el operativo, y en otro punto de la ciudad, los agentes del Centro de Operaciones Estratégica, capturaron a un cuarto narcomenudista de nombre Christian Rubén Márquez Bañaga “El Cris”, y quien iba a bordo de una camioneta de color gris, línea Nitro y marca Dodge, completamente polarizada y sin placas de circulación.
Los oficiales de inmediato le marcaron el alto al vehículo sospechoso, y quien al tratar de escapar fue encajonado, encontrando dentro de la unidad una bolsa de plástico y en su interior droga conocida como cristal.
Los captores detuvieron al narcomenudista e incautaron la droga y el vehículo.
Paralelamente al operativo en el sur del estado, en el norte, la Policía Estatal Preventiva, y previendo una nueva escalada de violencia –tras la ejecución de Martín Anaya Gorozave “El Talibán”– entre células del Cártel de Sinaloa y el de los Arellano Félix, reforzó la seguridad e inició una serie de operativos en el municipio de Mulegé.
Los oficiales interceptaron sobre la carretera Transpeninsular que va de Santa Rosalía a Guerrero Negro a dos sujetos, cuando viajaban a bordo de un vehículo, y quienes traían en su poder lo siguiente:
1.- 170 envoltorios de cristal.
2.- 2 paquetes y 3 bolsas de mariguana.
3.- 2 rifles M1, calibre 30.
Los narcomenudistas de 30 y 46 años, respectivamente, originarios de Loreto y San Ignacio, fueron detenidos y trasladados a la agencia del Ministerio Público de la Federación de la PGR en La Paz, y quien resolvería su situación jurídica.