Fue la cantante neoyorquina y diva del pop, Stefani Joanne Angelina Germanotta, popularmente conocida como Lady Gaga, la encargada de rendirle homenaje de ocho minutos al fallecido ícono del rock, David Bowie, cuyo rostro se tatuó en la costilla izquierda, a quien en la premiación del Grammy ofreció tributo.
Cabe destacar que Gaga es una admiradora del ídolo de Bowie, quien falleció el pasado 10 de enero, a quien ahora llevará impreso en su piel, tatuándose el rostro del cantante que aparece en el disco “Aladdin Sane”, imagen que la intérprete de “Poker face” y “Bad romance”, dijo cambió su vida, gracias a que la glamour del fallecido cantante expresaba un mensaje que calificó de ‘curativo para el alma’.
En la ceremonia 58 de la entrega del Grammy, a lo mejor de la música grabada, Lady Gaga cantó versos y coros de temas como “Changes”, “Space oddity”, “Rebel rebel”, “Suffragette city”, “Ziggy Stardust”, “Fashion”, “Fame”, “Under pressure”, Let’s dance”, y “Heroes”, acompañada por un gigantesca producción musical, coreógrafa y visual.